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Actualizado
el viernes, 28 de febrero de 2003 23:13:27 -0500
Tambogrande
promueve la intangibilidad de otras zonas amenazadas por
la minería
Tambogrande,
Piura (factortierra) – Tras conseguir el respaldo
del gobierno regional de Piura (noticia),
el ayuntamiento de Tambogrande se ha lanzado a la
cruzada de convencer a los gobiernos de otras
localidades de la zona para que respalden su pedido de
intangibilidad de los valles piuranos para actividades
mineras.
Al
conmemorarse dos años de la expulsión de la empresa
minera Manhattan –que Tambogrande recuerda hoy como su
“Día de la Dignidad”—el alcalde Francisco Ojeda
Riofrío ha recordado que la fortaleza y la solidaridad
de sus conciudadanos haya puesto en jaque al Ejecutivo
desde la época de Alberto Fujimori.
“Esa
fortaleza que nos mantiene unidos y la solidaridad
mundial (...) hace de que el gobierno tenga que estar
desesperado tratando de buscar una salida al
problema”, sostuvo.
En
1999, el Estado peruano otorgó una concesión minera la
empresa canadiense Manhattan Minerals para que explore y
explote un yacimiento ubicado en el extremo sur del
valle frutícola de San Lorenzo, incluyendo la ciudad de
Tambogrande. La concesión fue otorgada sin una licitación
previa, lo que constituye ilegalidad, señalan
investigadores independientes (noticia).
“Los
gobernantes no ha tenido entereza en declarar la nulidad
en este y otros casos”, recordó el abogado de Diaconía
para la Justicia y la Paz del Arzobispado de Piura y
Tumbes, Quique Rodríguez.
“En
estos cuatro años de lucha no hemos logrado convencer
al gobierno de que un proyecto como Tambo Grande no
tiene razón de ser; tenemos promesas incumplidas por
parte de nuestro presidente”, subrayó el alcalde
Ojeda, quien ahora se lanza a la caza de respaldo
regional.
Por
eso, este viernes se reunieron representantes de las
diversas comunas ubicadas en las provincias de Piura,
Sullana, Ayabaca, Morropón y Huancabamba (reportaje),
todas tachonadas de concesiones mineras metálicas (que
representan unas 800 mil hectáreas), y donde ya se están
desarrollando proyectos financiados por compañías
transnacionales.
La
cita finalizó con la firma de una declaración que pide
que los demás ayuntamientos emitan ordenanzas que
promuevan la intangibilidad de sus zonas para proyectos
mineros, propuesta acogida en forma positiva por los
asistentes.
Lo
inmediato para la resistencia tambograndina es asegurar
la intangibilidad de un área de 175 mil hectáreas en
las cuencas del Quiroz y del Alto y Medio Piura.
Para
el ingeniero económico Juan Aste Daffós, las claves
son el modelo de desarrollo y la participación
ciudadana, “Tambogrande debe reafirmar su vocación
agroindustrial”, mediante un mecanismo consultor
internacional.
El
gran problema, según Aste, es que “no en el Perú un
mecanismo que acerque todos los elementos de juicio para
el uso de los recursos naturales”.
Aste
ha publicado un estudio económico sobre el valle frutícola
de San Lorenzo que le establece un costo de 24,5
millones de dólares e ingresos por 17,7 millones de dólares,
que lo convierte en uno de los más rentables del Perú;
por lo tanto, “el Estado no puede estar priorizando a
la minería sobre otras industrias”.
“El
futuro de Piura se decide aquí en Tambogrande”,
sentenció por su parte Francisco Ojeda. “Si logra
salir triunfante, habrá ganado el Perú, porque será
una forma de decir al gobierno que no se puede hacer
minería en cualquier parte”.
Denunció
que las empresas mineras sólo han llegado para
“encarcelar campesinos, dividir dirigentes, falsificar
firmas e inventar organizaciones”.
Reiteró
el riesgo que implica la actividad minera al medio
ambiente, y que el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) da
por descontado que habrá efectos negativos: “Si me
sacan un ojo y me ponen uno de vidrio, lo mitigan, pero
me hacen daño”.
Armas
de doble filo
El
EIA es un documento que establece cómo se disminuirán
los impactos negativos que una actividad como la minería
pudiera generar en la zona; pero el Ministerio de Energía
y Minas devolvió el de Manhattan (sitio
web) por tener párrafos incompletos y presentar
algunas secciones en inglés.
Esta
puede ser un arma de doble filo para la empresa minera,
pues de no ser aprobado ocasionaría una caída en sus
acciones, que se cotizan en la Bolsa de Toronto (TSE:
MAN), como las producidas luego que casi la totalidad de
electores afirmaran voluntariamente que no deseaban
implantar la minería en San Lorenzo, en junio de 2002.
La
pérdida de licencia social apuró la aparición de una
Coordinadora de Desarrollo que dice haber reunido 16.500
firmas de apoyo al proyecto minero; pero la credibilidad
de este grupo fue puesta en entredicho luego que una
investigación de factortierra descubriera que al
menos la quinta parte de las firmas estaba fraguada (noticia).
Más
aún, la Municipalidad de Tambogrande informó el
viernes en un boletín que se ha detectado que entre los
firmantes hay personas que fallecieron incluso mucho
antes de que Manhattan ingresara a Tambogrande (mayo de
1999), como Fortunato Crisanto Rivas (+ 8.11.2002), Andrés
Nima Rosas (+24.04.1999), Rosalino Domínguez Riofrío
(+24.07.1993) o Maximiliano Arrunátegui Timaná
(+13.06.1983).
La
empresa minera hasta ahora no ha emitido comentarios al
respecto.
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