Desde tiempos remotos el hombre se ha caracterizado por su adoración a figuras que lo atemorizan. Estas figuras siempre han sido símbolos de los fenómenos naturales y los astros en el cielo, todos ellos misteriosos y poderosos a los ojos del hombre primitivo. En la actualidad existen todavía cultos y religiones que persisten en estas creencias. Muchas de las grandes religiones de hoy se sintieron influenciadas alguna vez por estos mitos.

En la literatura moderna se han destacado algunos escritores por su gran imaginación e ingenio y hay quienes se han destacado de una forma tal, que se convirtieron en los avatares de su propio universo mitológico. Escritores como J.R.R Tolkien, H.P. Lovecraft, etc, crearon nuevos mundos, con dioses, mitos y sucesos históricos propios. A pesar de que estas mitologías nunca han formado parte de la historia de las religiones propiamente dichas, éstas son una prueba fehaciente de lo que el genio humano puede llegar a crear para mitigar la angustia de creerse solo en el universo. En este sentido podemos tomar estos "mitos literarios" como un modelo a estudiar para comprender aún mejor la complejidad y el significado de los mitos, creencias y religiones que han existido y existen en nuestro planeta.