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Especies Extintas de Flora y Fauna Nacional (*)La diversidad Biológica es importante desde múltiples puntos de vista para la sociedad contemporánea. Ya sea por consideraciones científicas, culturales o económicas, es indispensable conocer la naturaleza y magnitud de la biodiversidad de una región o país. Una variable que debe ser tomada en consideración es la tasa de extinción. Esta, nos señala a que ritmo está desapareciendo esta Biodiversidad, y da la voz de alerta para una inminente intervención de parte de la comunidad. Chile, a pesar de su alta riqueza biológica, sin embargo presenta teoricamente, una tasa de extinción relativamente baja. Oficialmente, 2 especies de fauna y 1 especie de flora se han extinguido del territorio nacional. El Zarapito boreal, eras un ave que llegaba hasta nuestras costas proveniente del hemisferio norte, el Tuco-tuco de la Isla Riesco, fue una especie endémica que desapareció por intervención humana. El Sándalo de Juan Fernandez, arbol endémico del archipiélago, desapareció por sobreexplotación, lo mismo que está pasando con el Toromiro, especie que sobrevive solo como ornamental, estando extinguida en su hábitat natural. Esta es una de las razones por las cuales debemos abogar por la conservacion de las especies, pues forman parte de nuestro Patrimonio Biológico Nacional y Mundial. Cada especie que desaparece es un paso atrás en la cura de alguna enfermedad o una reserva alimentaria futura, para nuestros probables descendientes.
El Tuco-tuco de la Isla Riesco, Ctenomys magellanicus dicki Osgood; era una de las cuatro subespecies de Tuco-tuco de Magallanes, roedores de gran talla y de hábitos subterraneos. Su extinción es debido probablemente a la introducción de ovinos a la isla, los que pisotearon y obturaron los orificios de entrada a sus galerías; razón por la cual la especie T.m. magellanicus desapareció de las pampas que rodean Punta Arenas, desde 1920. Esta razón, y la introducción de gatos y perros a su hábitat insular logró que la especie fuese declarada extinta desde mediados de los años 30. El Sándalo del Archipiélago Juan Fernandez, Santalum fernandezianum F. Phil.; desaparecido a finales del siglo XIX y principios del siglo XX, objeto de una explotación comercial bastante intensa de su aromática madera. Actualmente solo se le conoce por registros fósiles de su madera y colectas de herbarios, como el del Museo de Historia Natural de Chile. El Toromiro, Sophora toromiro (Phil.) Skottsb., era un arbol pequeño, de hasta 2 metros de altura, endémico de la Isla de Pascua, fue rápidamente agotado por una intensa explotación por uso en artesanía, debido a su madera, dura y café-rojiza. Se observó el último ejemplar entre grandes peñascos en el flanco interior del cráter Lago Ranawak, al SW de la isla, en 1911. Afortunadamente en este caso, se encontraron algunos ejemplares creciendo en el continente (Valparaíso) como plantas ornamentales, a mediados de los años 50. Es así como se ha implementado un plan de reintroducción de esta especie a la isla, pero con resultados medianamente aceptables. Chile ha perdido 3 especies a lo largo de su historia. Esto es favorable considerando que algunos países de el hemisferio sur tienen tasas de extinción de alrededor de 3 especies al año. Pero esto no nos debería llevar a considerar el medioambiente y los ecosistemas que poseeemos como recursos infinitos. Debemos trabajar para que este listado no crezca jamás. La conservación de las especies, es una herramienta fundamental en la mantención y conservación del pool genético presente en el Patrimonio Biológico Nacional. Existen muchas medidas que pueden llevarse a cabo como estrategia. Una de las mas funcionales es el conocimiento. Mientras mas especies se conozcan, más conciencia se logra crear en la fragilidad de los ecosistemas y en su funcionamiento o alteración y nuestra relación como seres humanos.
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