PROGRAMA DE CONSTRUCCION

 

 

 

Universidad Nacional de Colombia

Sede Manizales

 

Formamos profesionales para la planeación, gestión, administración, ejecución, investigación y mantenimiento de obras de infraestructura, ya diseñadas y calculadas. Formamos Constructores que actuen con ética,  responsabilidad social y respeto por el medio ambiente... Ya se han graduado los primeros alumnos de la carrera: felicitaciones y éxito en su desempeño profesional.

 

Investigación y Extensión

Trabajo #1

Autor: 

Tema: Geotecnia

Título: RIESGO EN LA ZONA ANDINA TROPICAL POR LADERAS INESTABLES

   

Las presentes notas están relacionadas con un tema en el que la ingeniería regional ha hecho aportes significativos, desde la creación de la actual Corporación Regional Corpocaldas,  denominada entonces Cramsa, para enfrentar  la inestabilidad de las vertientes, dada su importancia para las comunidades de la región andina.

 

La zona tropical andina se caracteriza por la inestabilidad de los suelos y por un ambiente de gran actividad tectónica. Estos aspectos se relacionan con la juventud de sus montañas sometidas a procesos orogénicos desde el paleozoico al reciente. El clima y la biodiversidad, configuran el medio ecosistémico de este escenario. 

 

En Colombia, el 70% de la población habita la zona andina. Nuestros suelos de montaña, por la condición tropical del país, son fundamentalmente suelos residuales y esa consideración los hace merecedores de un tratamiento singular, pues la mecánica de suelos que empleamos ha sido desarrollada para medios con las características de los suelos transportados, más típicos de las latitudes altas.

 

El desarrollo de metodologías para la evaluación del riesgo por deslizamientos, incorporando la complejidad de nuestros suelos, resulta de vital importancia en nuestro medio.

 

Se pueden definir riesgo, amenaza y vulnerabilidad, como conceptos probabilísticos a los que se pueden asociar  funciones para facilitar su manejo en términos de pronósticos.

 

Una amenaza natural puede o no provenir de otra de mayor orden  incluso puede ocasionar un evento posterior. Los deslizamientos pueden surgir a causa de un sismo o una lluvia y pueden ocasionar también aludes y avalanchas. De esta secuencia posible surge la necesidad de establecer la siguiente clasificación para las amenazas naturales:

 

- Primer orden: sismos, huracanes, volcanes y lluvias.

- Segundo orden: deslizamientos, maremotos, inundaciones.

- Tercer orden: aludes y avalanchas.

 

 Se hace necesario diferenciar y calificar el riesgo asociado a una amenaza dada, para no generar expectativas ociosas. Pude darse el Riesgo evitable, el controlable, y el aceptable.  Pero además existen el riesgo de cúmulo o total y el riesgo específico o local. El primero de interés para los individuos y agentes individualmente considerados y el segundo para la autoridad competente y para el sector de responsabilidad.

 

Los movimientos de masas son las amenazas más importantes en las zonas andinas. Los daños a bienes y pérdida de vidas se relacionan aquí con la inestabilidad de las vertientes intervenidas: deslizamientos, derrumbes, flujos. El movimiento de masas ocurre cuando el esfuerzo cortante supera la resistencia al corte del suelo.

 

Los parámetros que influyen en la inestabilidad del suelo se relacionan con el agua, el material, la geometría del terreno, y las situaciones del ambiente (fuerzas, procesos, etc). Los parámetros  son el Tipo de material, la Pendiente, las Condiciones hidrológicas, los Procesos morfológicos y los Parámetros externos, como distribución de la pluviosidad, sismicidad y vulcanismo.

 

Pero también las laderas (cuestas naturales) han sido transformadas en taludes por los modelados de la actividad antrópica y que con la expansión de la frontera agrícola, por prácticas deficientes en el uso y manejo del suelo, se han producido el descontrol hídrico y pluviométrico, la erosión y la deserfiticación de los suelos andinos.

 

Las etapas para lograr una evaluación exitosa, que conduzca a resultados concretos y útiles.

Secuencia de eventos: testigos, instrumentos, mecanismos, volumen, energía, causas, signos.

2º Condiciones ambientales: averiguar las causas y hacer estimativos espacio-temporales sobre la ocurrencia y extensión de los eventos. Utilizar datos meteorológicos, sismológicos y registrar si se dieron cambios previos en áreas aledañas como construcciones, riegos, explosiones, deforestación, roturas de líneas con líquidos, sobre cargas, interrupción de drenajes o cultivos.

Inspección detallada de morfología y estado de áreas aledañas y del deslizamiento: grietas, flujos de agua, obras, edificaciones, cultivos.

Análisis adicional.

Plan de instrumentación, manejo y control, según obras decididas.

6º Abandono del sitio y evaluación de las consecuencias.

 

La causa real de un movimiento de masas es casi un problema forense. Los factores contribuyentes pueden ser más visibles que la causa real o que el detonante del problema.

- Causas intrínsecas: suelen ser naturales y se relacionan con el agua subterránea, material, tectónica, topografía abrupta, etc.

- Causas detonantes: pueden ser naturales como la lluvia, el sismo, la erosión, o artificiales como cortes, deforestación, etc.

- Causas contribuyentes: similares a las causas detonantes pero que simplemente anticipan el evento.

- Las medidas pueden ser preventivas o correctivas, según prevengan la ocurrencia del evento o corrijan los efectos por el ocasionados.

Los factores de amenaza en caso de deslizamiento son la susceptibilidad debida a factores internos, los eventos detonantes como lluvias, sismos, erosión, sobrecargas, el potencial de energía, tanto la destructiva interna como la potencial, l

 

Los factores de riesgo por deslizamiento son, el nivel de la amenaza de deslizamiento,

el grado de exposición de elementos que puedan sufrir daños posibles, como los elementos sobre la ladera o al alcance o por generación de aludes u obstrucción de corrientes, la resistencia al fenómeno, no sólo desde el punto de vista físico sino también funcional. Se asume que la resistencia es un concepto opuesto al de la fragilidad.

 

La amenaza se puede representar en un mapa de susceptibilidad al deslizamiento, donde cada color involucra el grado de susceptibilidad del territorio a la ocurrencia de deslizamientos y cuyos niveles en forma decreciente son rojo, naranja y amarillo, o verde para las zonas no susceptibles.

 

Si se ha de valorar el peligro o amenaza debemos reconocer su existencia, evaluar la capacidad de manejarlo, estimar su probabilidad de ocurrencia, evaluar eventuales efectos y tomar la decisión de aceptarlo o no. Si se trata del manejo del peligro o amenaza, las posibilidades son evitarlo, removerlo, controlarlo (reducirlo), minimizar sus efectos o recurrir a sistemas de alarmas.

 

Las siguientes son las etapas para proceder a los análisis de vulnerabilidad, en caso de amenaza de deslizamiento, para evaluar una situación de riesgo dada.

- Seleccionar una amenaza potencial y asignarle características. Se alude a un tipo de movimiento de masas dado, con un volumen, intensidad y extensión dados.

- Identificar vidas y bienes amenazados y otros componentes físicos o servicios comprometidos.

- Determinar los efectos del evento sobre las personas y bienes señalados y sobre los sistemas de servicios. Además de los daños estructurales están los daños funcionales de los sistemas.

- En el caso de empresas de servicios comprometidas, debe estimarse la demanda de servicios básicos para el público y la reducción del servicio a causa de un evento desastroso.

-  Determinar los componentes críticos y vulnerables a la amenaza para estimar  la reducción de la oferta de servicios de una empresa o de un sistema.

- Ampliar otros efectos indirectos derivados del evento, por ejemplo por la ocurrencia de amenazas de tercer orden o por daños a terceros.

- Consolidar la información en una evaluación final, susceptible de ser revisada y actualizada en forma periódica y extraordinaria.

 

La metodología para el estudio del riesgo en caso de deslizamiento sugiere estas etapas:

- Identificación de la amenaza: recopilar y analizar información, identificación preliminar del riesgo y de las medidas urgentes.

- Evaluación de la susceptibilidad. Estudios cartográficos, hidrológicos, geológicos, agrológicos, de erosión, uso y manejo del suelo, zonificación de susceptibilidad, caracterización geotécnica de materiales, evaluación de estabilidad y susceptibilidad.

- Estudio de eventos detonantes de la amenaza: climatológicos, hidrológicos, sismológicos, de erosión o sobrecargas naturales, y efectos antrópicos. Se puede dar deslizamiento con lluvia y con sismo, deslizamiento sin ellos o con uno de ellos. La probabilidad final será la suma las probabilidades de cuatro situaciones diferentes.

 - Estudio del riesgo: evaluación de la amenaza, la vulnerabilidad y del riesgo.

- Medidas: sistemas de observación y alarmas, reducción de la exposición, reducción de la amenaza, incremento de la resistencia, y jerarquización de prioridades y estudios.

- Estudios económicos: análisis de las funciones de costo esperado, que es la suma del costo usual y el costo de falla. El costo de falla involucra pérdidas, reposición, interrupción, lucro cesante y efectos sociales, el costo usual involucra estudios, control, construcción y mantenimiento.

 

En Colombia predominan rocas blandas, es decir, materiales intermedios entre suelos y rocas. Por ejemplo, las rocas de bajo o medio metamorfismo como esquistos, filitas, algunas serpentinitas y anfibolitas, e incluso algunos gneises y rocas mal consolidadas y mal cementadas, como margas, lodolitas, limolitas y areniscas blandas.

 

Las rocas blandas son susceptibles a los cambios de humedad típicos del ambiente tropical. Para la zona andina en el oriente de Colombia predominan espesos coluviones y en el occidente suelos residuales y volcánicos. El occidente está afectado por tectonismo y sismos.

 

Es importante para el ambiente andino tropical considerar los suelos residuales con sus estructuras relictas o heredadas, que a diferencia de los suelos transportados, donde las discontinuidades son horizontales (predecibles), estas resultan con orientación aleatoria y buzamiento impredecible.

 

Los espesores de las alteritas son mayores en las zonas tropicales (vegetación y clima), como la cordillera Oriental de naturaleza sedimentaria. Los saprolitos son típicos de la zona andina (roca cristalina), como las zonas de batolitos a lo largo de la cordillera Central y Antioquia. Los andosoles se desarrollan en lugares con cenizas volcánicas donde se desarrollan haloisitas y alófanas (Cauca, Nariño y zona cafetera). Las lateritas son suelos típicos del Cauca y los Llanos Orientales.

 

Además de un clima con contrastes de temperatura y precipitación, existen factores tectónicos.

 

La precipitación es alta en Chocó y el margen llanero, moderada en la zona cafetera y baja en las zonas desérticas de Colombia (Guajira, Alto Magdalena, Villa de Leiva).

Colombia en su zona andina, tiene fallas, muchas activas, mostrándose en sus laderas inestables zonas con intenso fracturamiento donde los materiales presentan trituración y brechamiento. El occidente está afectado por las fallas de Romeral y Palestina (rumbo) y el oriente por el sistema de las fallas frontales de los Llanos (inversa). Ambas son de alto riesgo sísmico.

 

La falla geológica condiciona el drenaje interno y tras todo ello se presenta una cronoestratigrafía en repetidas ocasiones desfavorable puesto que en los estratos de diferentes edades se presentan contrastes de permeabilidad, zonas débiles, etc.

 

Si se integran en una zona cualquiera de Colombia, aunque sea a nivel regional, un mapa geológico, un mapa tectónico y un cuadro de movimientos masales clasificados, se pueden inferir algunos factores de inestabilidad (inherentes, detonantes, etc.). Si superponemos relieve y sobre-fracturamiento obtenemos zonas más o menos propensas a deslizamientos. En Colombia las áreas de influencia del sistema Romeral y de las fallas del margen llanero se pondrían en evidencia como zonas altamente inestables.

J. Montero (1990)  señala en Colombia varias provincias con amenaza alta a deslizamiento así:

- Entre la falla Romeral y el Cauca.  Con rocas metamórficas, rocas con cataclasis y arcillas alófanas remoldeadas.

-  La cordillera Oriental. Con suelos espesos (alteritas) sobre lutitas que son químicamente alterables.

- El margen llanero.  Muy afectado por el ambiente tectónico y la naturaleza sedimentaria de los suelos.

- Zonas con potentes flujos alterados. Como la Estampilla (Manizales), donde se encuentran depósitos fluviotorrenciales alterados y en procesos de movimientos masales.

- Zonas de coluviones.  Como los de Quebrada Blanca en la vía al Llano.

- Saprolitos.  En zonas de debilidad tectónica.

 

BIBLIOGRAFIA

DUQUE ESCOBAR, Gonzalo. Manual de Geología para Ingenieros. Universidad Nacional, Manizales. 1998. www.oocities.org/manualgeo

GONZALEZ, Alvaro Jaime. Notas del Curso Estabilidad de Taludes, del Postrado de Geotecnia de la Universidad Nacional de Colombia, Sede Manizales, 1994

CARDONA, Omar Darío. Evaluación de la Amenaza, la vulnerabilidad y el riesgo. Taller regional de capacitación para la administración de desastres. ONAD, PNUD, OPS, UNDRO. Bogotá, 1991.

MONTERO, Juan. Curso de Estabilidad de Taludes, Procesos, Factores y Causas de Inestabilidad de  Taludes y Laderas. Santafé de Bogotá. 1990.

SPETERS, Robert. Notas de la Charla "Tecnologías para el Estudio de Amenazas Naturales en el Medio Andino". ITC y DTU de Holanda. Jueves 30 de marzo de 1991, Universidad Nacional, Manizales.

 

Manizales, Diciembre de 2002

 

 

Página principal       Nuestra carrera     Nuestros temas

Materias de la carrera     Plan de estudios     Requisitos y aptitud

    Investigación y extensión     Sala de lecturas      Recursos 

Docentes y enlaces     Estudiantes    La ciudad