Alvarez Gómez, Santiago
Nacido en la
provincia de Ourense el 11 de febrero de 1913. Periodista y escritor. Antes
de la guerra fue concejal en su pueblo desde marzo a julio de 1936.
Comenzado el conflicto actuó como comisario político de batallón, de
brigada, de división y del V Cuerpo de Ejército, lo que le condujo a visitar
escenarios de guerra como Brunete.
Miembro del
Comité Central del Partido Comunista desde 1937 y del secretariado desde
1972 a 1981. Perteneció así mismo a la comisión internacional. Redactor de
"Mundo Obrero" durante veinticinco años, colaborador de Radio España
Independiente y director de los semanarios " El Miliciano Gallego",
"Pasaremos", "Acero" y "Nueva Galicia", publicó libros sobre temas
políticos, históricos, sociológicos y agrarios.
Murió en abril
de 2002.
Asensio Cabanillas, Carlos
Madrid, 1896.
Se incorporó a los quince años a la Academia de Infantería. Destinado a
Africa, combatió durante siete años de Marruecos y mandó un grupo de
Regulares de Tetuán. Ascendió a comandante por méritos en 1930, al llegar la
República permaneció en el Ejército. Estudió en la Escuela Superior de
Guerra, se diplomó en Estado Mayor y en abril del 36 es teniente coronel.
Nuevamente
destinado en Africa, tomó parte activa en la conspiración militar y el 17 de
julio se subleva en Tetuán al frente del Grupo Fuerzas Regulares nº 1. Por
orden de Franco, el primero de agosto se traslada a Sevilla al mando del
primer contingente de tropas aerotransportadas y se le encomendó la jefatura
de una de las unidades de la columna Madrid, bajo la dirección de Yagüe. Las
tropas de Asensio alcanzaron Badajoz el 14 de agosto y Talavera de la Reina
el 3 de septiembre. En el ataque a Toledo mandaba el ala izquierda
sublevado.
Durante el
avance sobre Madrid, tomó Navalcarnero e Illescas y participó en los
combates de la Ciudad Universitaria. Asciende a coronel, e interviene en las
operaciones de la carretera de La Coruña y dirige el ala derecha en la
Batalla del Jarama. Habilitado para general de brigada, condujo grandes
unidades en las batallas de Brunete y Teruel, así como en la campaña de
Cataluña, donde mandó una de las divisiones del Cuerpo de Ejército de
Navarra. En la ofensiva final sobre la Zona Centro actuó con el Cuerpo de
Ejército Marroquí, de Yagüe.
Concluida la
confrontación, Asensio realizó una prestigiosa carrera. Alto comisario en
Marruecos en 1939 y jefe del Estado Mayor Central del Ejército en 1941, en
septiembre del 42 fue nombrado ministro del Ejército. Tras cesar en el
cargo, en 1945, pasó a la Capitanía General de Baleares y luego fue jefe de
la Casa Militar del Generalísimo. Como otros altos mandos militares,
desempeñó cargos políticos, procurador en Cortes por designación de Franco,
consejero del Reino y presidente del Consejo Superior de Acción Social.
Políticamente estaba próximo a la Falange franquista. Murió en 1969.

Casado López, Segismundo
Natural de Nava
de la Asunción (SG), octubre de 1893. Hijo de un oficial del Ejército, a los
quince años ingresó en la Academia de Caballería de Valladolid. A su salida,
inició una lenta carrera militar, que le llevó a diversos destinos en la
Península y en Marruecos. Realizó estudios en la Escuela Superior de Guerra
y obtuvo el diploma de Estado Mayor.
De talante
liberal y afiliado a la Masonería, aunque sin significación política, se
adhirió a la República en 1931. Agregado como profesor a la Escuela Superior
de Guerra, en 1933 ascendió a comandante y un año después pasó a mandar la
escolta de caballería del Presidente de la República. Considerado un
republicano leal, en 1936 fue designado jefe de toda la guardia
presidencial, siendo ya Azaña presidente.
Al estallar la
sublevación de julio de 1936, el comandante Casado asumió la protección
personal del Jefe del Estado. Su capacidad papa la planificación le hizo
destacar rápidamente y a partir de noviembre, como jefe de operaciones del
Estado Mayor Central, tuvo parte muy activa en la defensa de Madrid y en la
Batalla de Guadalajara.
En la Batalla
de Brunete mandó accidentalmente el XVIII Cuerpo de Ejército y en Belchite
se hizo cargo del XXI, con el grado de Tte. Col. En esta época tenía ya
enfrentamientos con los comunistas, que le acusaron de negligencia. Ascendió
a coronel en mayo de 1938, ese mismo mes se hizo cargo del Ejército del
Centro, con la responsabilidad de defender Madrid. Tras la Batalla del Ebro
se convenció de la necesidad de llegar a una paz negociada. En colaboración
con el coronel Prada organizó una conspiración y el 5 de marzo de 1939,
siendo ya general, dio un golpe contra el Gobierno. Como presidente
provisional del Consejo de Defensa, combatió a los comunistas y entabló
negociaciones con las autoridades de Burgos.
A finales de
marzo se trasladó a Valencia y luego a Londres. En 1947 se estableció en
Venezuela y vivió como hombre de negocios hasta su regreso a España, en
1961. A partir de entonces intentó reingresar en el Ejército, pero no lo
consiguió. Murió en Madrid en 1968.
De Mateo y Sousa, Eligio
Nacido el 29 de
noviembre de 1908 en Madrid. Licenciado en Ciencias Químicas y catedrático.
Sobrino de la esposa de Manuel Azaña, Dolores Rivas Cherif, participó en su
juventud en conspiraciones republicanas y en la sublevación de Cuatro
Vientos. Al desencadenarse el golpe militar de 18 de julio, fue uno de los
fundadores de V Batallón de Voluntarios.
Durante la
guerra intervino en los combates de la Sierra de Guadarrama y en la retirada
de Oropesa a Talavera y Madrid. Estuvo en las batallas del Jarama, Brunete,
Zuera y Alto Aragón. Cuando la ruptura del frente aragonés cayó herido. Tuvo
en sus manos diversos servicios del Estado Mayor republicano.
Se exilió a
Méjico en 1939, dedicándose a la enseñanza.
González Valentín, " El
Campesino"
Probablemente
originario de la localidad extremeña de Marcocinado, en 1909, comenzó a
trabajar a los ocho años en las minas de Peñarroya. Hijo de un jornalero
anarquista, sus años juveniles son muy poco conocidos. Hacia 1927 tuvo que
huir a la sierra como fruto de un enfrentamiento con guardias civiles.
Parece que se alistó en la Legión, de la cual terminaría desertando. A
comienzos de los años treinta era un modesto contratista que trabajaba al
mando de una cuadrilla en la reparación de caminos, lo que llevó a residir
durante varios años en Quijorna cuando se realizaron las obras de la
carretera Villanueva de la Cañada-Quijorna-Navalagamella.
Afiliado al PCE
poco antes del comienzo de la guerra, en el verano de 1936 se alistó en el
Quinto Regimiento y combatió en Somosierra, donde destacó por sus cualidades
de jefe de pequeñas unidades. Su actuación llamó la atención de los
responsables del PCE, que le convirtieron en un mito de la resistencia
republicana y favorecieron su continua promoción militar.
Jefe de una
brigada mixta a finales de 1936, combatió en diferentes frentes de la zona
centro. En febrero de 1937 participó en los combates del Jarama y en marzo
en la Batalla de Guadalajara. Al mando de la 46 División tomó parte en
Brunete. Esta acción, junto con su comportamiento en Teruel, ciudad que
defendió frente a la contraofensiva franquista, le enemistan con altos
oficiales comunistas. Acusado de cobardía por Líster en el Ebro, abandona su
carrera militar.
Al terminar la
guerra se trasladó a la URSS. Tras ser expulsado de la Academia Militar
Frunze, fue recluido en un campo de concentración en los Urales. Fugado por
dos veces, la ayuda de Kalinin le permite escapar a Francia. Desde entonces,
su vida se ve envuelta en una espesa niebla. Dado por muerto por los
comunistas, según sus propias declaraciones organizó una partida de
guerrilleros antifranquistas. Estuvo luego en Cuba y en Bolivia,
participando en actividades clandestinas. A mediados de los años setenta se
supo que residía, en precarias condiciones, en la localidad francesa de Metz.
Líster Forján, Enrique
Natural de
Almeneiro, A Coruña, nacido en 1907. Hijo de cantero y campesina, marchó a
Cuba en 1919 y regresa a España nueve años más tarde. Entra en el PCE, donde
permanece hasta 1970. De 1932 a 1935 recibe instrucción militar en la Unión
Soviética. Torna a España y se le nombra instructor de las Milicias
Antifascistas Obreras y Campesinas. Al producirse el Alzamiento se incorpora
como voluntario en las Milicias Populares. Asume luego el mando del Quinto
Regimiento, con el que participa en la defensa de Madrid. Como jefe de la XI
División, interviene en las batallas de Guadalajara, Brunete y Teruel. Es
jefe del V Cuerpo de Ejército en la Batalla del Ebro.
General de los
ejércitos ruso, polaco y yugoslavo, tomó parte con la URSS en la II GM.
Finalizada ésta, fija su residencia en París, después en Praga y, muerto
Franco, en Madrid. Fue secretario general del PCOE. Murió en Madrid en 1994.
Menant Miaja, José
El héroe de la
defensa de Madrid era asturiano, había nacido en Oviedo en 1878. Estudió el
bachillerato en su ciudad natal y luego ingresó en la Academia Militar. Su
carrera profesional, realizada en parte en Marruecos, no registra ningún
acontecimiento de relieve hasta la guerra civil.
Al estallar la
sublevación mandaba la 1ª Brigada de Infantería, con sede en Madrid. El 18
de julio, Martínez Barrio le designó ministro de la Guerra en su efímero
Gobierno. Nombrado jefe de operaciones en el Sur, el 28 de julio liquidó
la sublevación de Albacete e inició una lenta progresión por Andalucía que
le llevó a las puertas de Córdoba, pero no pudo tomarla.
Destinado por
Largo Caballero a la Jefatura de la 1ª División con sede en Madrid, se hizo
cargo de la defensa de la capital y asumió la presidencia de la Junta de
Defensa. Fuertemente apoyado por los comunistas, Miaja se convirtió en uno
de los mitos de la propaganda al detener, junto con su jefe de Estado Mayor,
Rojo, el avance de los franquistas en las calles de Madrid. A lo largo de la
guerra concentraría cada vez mayor poder militar en sus manos. Convertido en
jefe de las fuerzas que luchaban en el Jarama, logró otro éxito defensivo y
el Gobierno le nombró jefe del Ejército del Centro en sustitución de su
rival, Pozas. Desde este cargo jugó un papel de primer orden en las batallas
de Guadalajara y Brunete. En junio de 1937 se le otorgó la Laureada.
Tras la llegada
al mar de las tropas de Franco, Miaja fue designado jefe del Grupo de
Ejércitos de la Región Centro. En enero de 1939 ascendió a la categoría de
comandante en jefe del Ejército Popular. El 16 de febrero participó en la
reunión del aeródromo de Los Llanos (Albacete), donde defendió la tesis de
la resistencia hasta el fin. Poco después apoyó la sublevación de Casado y
fue presidente del Consejo Nacional de Defensa, que intentó negociar con
Franco.
Perdida toda
esperanza, abandonó Madrid el 26 de marzo y tres días más tarde emprendía
viaje a Orán y posteriormente se trasladó a París. Establecido en Méjico,
falleció en la capital federal a los ochenta años, el 13 de enero de 1958.
Modesto Guilloto, Juan
Puerto de
Santamaría (CA), 1906. Trabajador en un aserradero desde muy joven. Hizo el
servicio militar en Africa como cabo de Regulares participando en algunas
operaciones bélicas. De vuelta a su ciudad natal, organizó el Sindicato de
Oficios Varios y el Socorro Rojo. En 1930 ingresa en el PC, llegando a ser
responsable local tras la proclamación de la República. En 1933 es llamado a
Madrid por la dirección del partido y viaja a la URSS para formarse
políticamente. Regresó a España y se encargó de la administración del diario
Bandera Roja, trabajó en la creación de células comunistas dentro del
Ejército y en el encuadramiento de las MAOC.
Iniciada la
rebelión de julio participó en el asalto al Cuartel de la Montaña y con
posterioridad en los combates del Guadarrama. Integrado en el Quinto
Regimiento, hizo una carrera rapidísima hasta llegar a jefe de la unidad a
finales de octubre de 1936. Herido en Illescas, un mes más tarde le llega el
nombramiento de jefe de la 18ª Brigada Mixta. Convertido en uno de los
mandos más populares del EPR, a comienzos de 1937 fue nombrado jefe de la IV
División, que participaba en la defensa de Madrid, y miembro del Comité
Central del PCE. Tras participar en las batallas del Jarama y Guadalajara,
pasó a dirigir el V Cuerpo de Ejército, con el que luchó en Brunete,
Belchite y Teruel. Asciende a teniente coronel en mayo del 38, guió el
Ejército del Ebro hasta la caída de Cataluña. Poco tiempo después de
ascender a general tuvo que abandonar España y establecerse en la URSS.
Pugnó por suceder a José Díaz, resultando derrotado. Abandonado por sus
antiguos compañeros, falleció en Praga en abril de 1969.
Rojo Lluch, Vicente
Nacido en 1894,
era hijo de un suboficial del Ejército, aunque quedó huerfano muy pronto.
Del colegio de huérfanos militares pasó a la Academia de Infantería de
Toledo. Tras el casi obligado paso por la guerra colonial, en Marruecos,
estudió Estado Mayor y volvió a la Academia de Toledo como profesor.
Estudioso de los temas militares, escritor y director de una revista,
políticamente, era un hombre moderado, así como un católico practicante. En
el verano de 1936, estaba destinado como profesor en la Escuela Superior de
Guerra de Madrid. Al estallar la guerra, el comandante Rojo se mantuvo leal
al Gobierno, y fue uno de los militares profesionales que participó en la
reorganización de las fuerzas republicanas. En Toledo intentó, sin éxito,
una mediación humanitaria con los defensores del Alcázar. Designado jefe del
Estado Mayor de Miaja para la defensa de Madrid, preparó un eficacísimo plan
de protección de la ciudad, que evitó su caída. A partir de entonces, su
fama como organizador ni hizo sino aumentar. Ascendido a teniente coronel,
se le nombró jefe del Estado Mayor del Ejército del Centro, y tuvo una
destaca actuación en la planificación de las operaciones en el Jarama,
Guadalajara, Brunete y Belchite.
Ascendió a
coronel y luego a general, admirado y protegido por los comunistas, se hizo
cargo del Estado Mayor Central, pero en realidad, dirigió al Ejército
Popular durante las fases finales de la guerra. Proyectó la toma de Teruel y
la ofensiva del Ebro. Tras la caída de Cataluña, se mostró partidario de la
rendición, lo que le llevó a establecerse en París y enfrentarse con Negrín.
Finalizada la
contienda, vivió el exilio accidentado de otros muchos republicanos. Residió
largos años en Argentina y Bolivia, y escribió libros como "
Alerta los Pueblos", "Así fue la defensa de Madrid" y "España
Heroica", en los que justificaba su actuación. Regresó a España en 1957,
acogiéndose a una amnistía. Falleció en Madrid en 1966.
Varela Iglesias, José
Hijo de un
suboficial de Infantería, nació en Cádiz en 1891. Ingresó en la Infantería
de Marina en 1909 y ese mismo año se ofreció voluntario para combatir en
Africa. Dos años después había ascendido a sargento y regresó a la Península
para ingresar en la Academia de Infantería de Toledo. Destinado nuevamente a
Africa en 1915, combatió con los Regulares de Larache. En 1920 fue ascendido
a capitán y se le concedió la Laureada de San Fernando por la acción de la
Cueva de Eumán; dos años más tarde recibió una segunda Laureada tras ser
herido en la acción de Beni Arós.
En 1924 recibió
adiestramiento como piloto y se integró en una escuadrilla de bombardeo en
Melilla. Volvió a combatir en Infantería y en febrero de 1926 fue
ascendido a teniente coronel por méritos de guerra. Participó en el
desembarco de Alhucemas y, al llegar la paz, continuó como jefe de los
Regulares de Ceuta, con el grado de coronel.
Destinado en
1930 a la Península, tomó el mando del Regimiento de Infantería nº 67, con
guarnición en Cádiz. Represaliado por los gobernantes republicanos,
participó en el complot de Sanjurjo, pero fue detenido en Cádiz y recluido
en prisión. A partir de entonces se orientó políticamente hacia el
Tradicionalismo y redactó la Ordenanza del Requeté. Rehabilitado en 1935,
ascendió a general de brigada y tomó parte muy activa en la conspiración
militar.
Sublevado en
Cádiz en julio de 1936, operó durante del verano en Andalucía, acudiendo en
socorro de las guarniciones de Córdoba y Granada. A finales de septiembre de
1936 mandó las operaciones sobre Toledo y luego dirigió la marcha y el
ataque contra Madrid.
Asciende a
general de división en mayo del 37 y participa en las batallas de Brunete,
Teruel y el Ebro y en la ofensiva final en Levante.
Nombrado
ministro del Ejército en agosto de 1939 y ascendido a teniente general en
1943, reorganizó profundamente la estructura militar. Afectado por los
sucesos de Begoña, cesó el 5 de septiembre de 1944 y se le encomendó el Alto
Comisariado en Marruecos. Murió en Tánger en 1951.
Yagüe Blanco, Juan
Hijo de un
médico, nació en San Leonardo (SO), en 1891. Tras pasar por la Academia de
Infantería de Toledo fue destinado a Burgos y en 1914, pasó a Marruecos.
Allí realizó una brillante carrera, llegando a comandante en 1921 y
recibiendo ocho cruces del Mérito Militar Individual.
Afectado por
numerosas heridas fue destinado a la Península en 1924, pero regresó a
Africa cuatro años después, ya como teniente coronel, y se hizo cargo de los
Regulares de Larache. Considerado desafecto a la República, fue degradado a
comandante y trasladado a Vitoria. En octubre de 1934 Franco le encomendó
una de las columnas que operaban en Asturias contra los revolucionarios.
Destinado a un
regimiento de la guarnición de Madrid, consiguió un nuevo puesto en
Marruecos. Militar de ideología falangista, tomó parte en la preparación de
la sublevación en Ceuta y en el paso de las tropas marroquíes a la
Península. El 7 de agosto se trasladó a Sevilla y tomó el mando de las
columnas africanas que avanzaban hacia Madrid. Tras la toma de Toledo,
asumió el mando de un ala de ataque a la capital.
El 16 de
diciembre entró en la Ciudad Universitaria madrileña, pero tuvo que entregar
el mando, víctima de un ataque cardiaco. Ascendió a coronel, se le confió el
mando de la 4ª División y en julio de 1937, ya como general de brigada, el
del I Cuerpo de Ejército.
Participó en
las batallas de Brunete, Teruel, Belchite y el Ebro y en la ocupación de
Cataluña. Al terminar la guerra mandaba el Cuerpo de Ejército Marroquí.
Aunque su
falangismo le ocasionó problemas, fue miembro del primer Consejo Nacional de
FET y de las JONS y ministro del Aire de agosto de 1939 a junio de 1941.
Como capitán general de la Sexta Región (Burgos) dirigió las primeras
operaciones contra el maquis. Tras su muerte, en octubre de 1952, Franco le
concedió el marquesado de San Leonardo.


Aquellos que en
uno y otro lado de la trinchera dejaron sus vidas y su
juventud.
Aquellos que
sintieron el horror y el miedo.
Aquellos que
quedaron marcados por el trazo de la angustia.
Aquellos que
tuvieron que abandonar su hogar y emprender un viaje hacia la nada.
Aquellos
inocentes que no supieron el por qué.
Aquellos a
quien nadie preguntó.
Aquellos
rostros anónimos de quién nadie habló.
Aquellos que
esperaron a quién nunca llegó.
Aquellos que
fueron víctimas del odio y la sinrazón.
Jesús Vázquez
Ortega