El grueso
pantalón que usaban amarrado unos 20 cm. bajo la rodilla, llevando
en la cintura una especie de faja. Las ojotas de cuero de
lobo marino, material del cual también eran fabricados los capachos
usados para extraer mineral desde el interior de las faenas mineras.
Con el tiempo, todas estas vestimentas fueron reemplazadas por el
actual "traje de chino", tapizado de espejuelos y delicados
bordados. Como buenos poetas, los chinos improvisan versos
a la virgen, a los que agregan melodías litánicas y dolientes, las
que son lamentos, saludos, despedidas o gracias a los favores concedidos.
Los "Chinos" son los servidores más cercanos de la Virgen,
y se expresan a través del sonido de flautas y tambores, que representan
el golpe del "combo" en la "cuña".
Existen varias suposiciones sobre el nombre de "Chino".
La más aceptada es la acepción antigua de "Chino", servidor,
así la Virgen así sería la "China" o "Chinita",
la servidora.
|