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Para que el aceite de freír se mantenga limpio, pon en él un trozo de zanahoria, absorberá la suciedad.
Si agregas una pizca de azúcar al agua de cocción de las zanahorias, estas quedarán mucho más sabrosas.
Al rallar zanahorias, échales enseguida zumo de limón para evitar que se ennegrezcan.
Come cada día varias zanahorias, te ayudarán a broncearte y después a mantener la piel morena. Además, si tienes la piel blanca, dos vasos de zumo de zanahoria al día te ayudarán a prevenir el enrojecimiento de la piel cuando estás al sol.
Prepara un zumo de zanahoria con 250gr. de zanahoria crudas, una cucharada de miel y un poco de zumo de limón. La piel quedará rehidratada por dentro, al tiempo que este remedio purifica el organismo.
Prepara un zumo de zanahoria con la licuadora y mezcla con una yema de huevo, dos cucharadas de nata líquida, unas gotas de aceite de oliva y una cucharada de miel. Aplica esta mascarilla sobre el rostro o sobre la parte del cuerpo a tratar y deja actuar durante 20 minutos. Quita con una esponja y agua tibia.
Hierve varias zanahorias, pélalas y córtalas en rodajas muy finas. Aplícalas sobre las estrías y cúbrelas con una gasa fina. Déjalas actuar 20 minutos y comprobarás que el betacaroteno de esta hortaliza mejora el aspecto de las estrías borrando su desagradable color blanquecino.
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