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Las manchas de tinta roja desaparecen con facilidad si las dejas unas horas mojadas en leche. Después sólo tienes que frotar un poco y aclarar.
Para eliminar las manchas de moho de tus prendas, pon las piezas en leche durante unos días y lávalas después.
Las manchas de pintura fresca se eliminan perfectamente con un poco de leche tibia.
Aplica durante un rato leche caliente sobre ellas, después, aclara o lava y habrán desaparecido por completo.
Las manchas de aceite desaparecen si, después de mezclar leche y limón, las frotas directamente con esta solución.
Para quitar las manchas de sangre nada mejor que utilizar leche muy fría.
Remójalas con leche caliente y luego aclara con agua amoniacada.
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