Nebulosa Ojo de Cerradura. Hubble
Eritage |
Guía Astronómica Gonzalo Duque-Escobar, P. As. Universidad Nacional de Colombia Manizales, 1992 |
GUIA Nº 12
TEORIAS COSMOGONICAS
1.
ALGUNOS CONCEPTOS
1.1
Antimateria
Por
cada partícula elemental, existe una antipartícula (raras excepciones);
por ejemplo del electrón el positrón; entre ellas sus propiedades son opuestas,
en su reacción se aniquilan produciendo energía en rayos gamma, equivalentes a
100 veces la energía de fusión nuclear, del aniquilamiento del positronio (par
e+ e-) se demuestra que masa y energía son dos aspectos
de la misma cosa. Como hipótesis, de existir cuerpos de antimateria, deberían
estar separados de la materia. Una galaxia y una antigalaxia se deberían
repeler por la interacción gravitatoria.
1.2.
Cuásares
Los
hay de dos tipos: los ópticamente observables
que pueden ser galaxias cuasiestelares y los radio-eléctricamente
observables que se presentan como
fuentes cuasiestelares (radio-ondas). Ambos son fuentes radiantes casi
puntuales, (a modo de estrellas), y de espectro insólito, por su gran
desplazamiento al rojo, lo que significaría que se alejan casi a la velocidad
de la luz y por lo tanto estarían en los confines del Universo. Así, sería la
macro-estructura más antigua que se ha detectado y en tales circunstancias su
luminosidad sería enormemente superior a la de una galaxia. Pero,
paradójicamente, por la energía emitida su diámetro debería ser mucho mayor que
el de las galaxias y su contorno observable, más sin embargo en las fotos,
apenas presentan el tamaño de una estrella gigante. Tan pequeño diámetro y tan
alta densidad (como estrellas masivas que chocan y producen reacciones en
cadena) permiten la hipótesis de un núcleo galáctico en explosión a modo
de galaxia supernova.
1.3.
Nebulosas
Pueden
ser interestelares (entre estrellas) e intergalácticas (entre galaxias). Por la
actual composición del Universo, 1H = 90%, 4He = 9%, otros = 1% así: 12C
= 0.03%, 14N = 0.01% 16O
= 0.06%, su edad estaría entre 10 mil y 20 mil millones de años. Las nubes se
orientan en el campo magnético de la galaxia o con el campo magnético del
cúmulo galáctico.
Otra
clasificación de las nebulosas es en Región H1 y Región H2. Las de la Región
H1 se forman por Hidrógeno frío, t = 100°K, no
emiten luz, el gas está menos denso y no es ionizado, mientras que en las de la
Región H2 la temperatura es 10000°K y los
gases están ionizados, por la luz ultravioleta procedente de las estrellas en
el interior de la nube, ejemplos, las nebulosas Orión y Tarántula.
1.4.
Agujeros negros
Es
la fase última de una estrella de gran masa que ha colapsado por su propio peso, comprimiéndose hasta formar un
punto de densidad infinita y volumen cero. Los físicos llaman a este punto singularidad;
una región en la que se vienen abajo las leyes normales de la física y en las
que el concepto de tiempo pierde el sentido.
|
Figura
62. El agujero negro.
Tal
singularidad está rodeada de enormes fuerzas gravitatorias. La atracción
gravitatoria impide que la luz salga de un cierto entorno, denominado horizonte
de sucesos, manteniendo así invisible el agujero y dándole su nombre.
Incluso, la materia que se aproxima demasiado es atraída y queda atrapada para
siempre, incluso por fuera de este horizonte, en una región denominada ergósfera.
Si de la ergósfera, puede salir la luz, no podrá hacerlo un planeta.
1.5.
Agujeros blancos
Entes
hipotéticos, reversos de agujeros negros, por donde se generaría materia
proveniente de otro Universo. El mejor candidato sería el Universo en su
conjunto.
1.6.
Radiación remanente
Puede
ser Radiación Cósmica Galáctica y Radiación de Fondo.
La
primera, explicada por supernovas, consiste en rayos cósmicos (alta frecuencia) que pueden incidir o
escapar de la galaxia, según su campo magnético la oriente.
La
radiación de Fondo, está constituida por ondas de radio omni-direccionales (en
todas las direcciones), que podrían ser el remanente del Big Bang. Esta
radiación, equivalente a una temperatura actual para el Universo de ~3°
K, y que ha disminuido con su expansión, nos permite
calcular su edad termodinámica.
2.
LAS TEORIAS COSMOGONICAS
Cuatro
teorías principales explican el origen del Universo. Las tres primeras
(Explosiva 1ª y 2ª y la Estacionaria), aceptan el Universo en expansión; la 4ª
lo considera de radio constante, y por lo tanto, no acepta la Ley de Hubble,
según la cual, si retrocedemos en el tiempo, disminuiría el radio del Universo
y la materia estaría comprimida.
Explosiva
1ª o del Big Bang (Graan explosión): dice que hace 15000
millones de años, materia y energía se comprimían en un superátomo radiactivo
al máximo, donde la concentración de neutrones llegaba a una densidad de 1000
millones de toneladas/cm3. Su explosión desintegra los neutrones
para formar protones y electrones y luego los elementos.
Bajo
el presupuesto de que nacen aquí el Espacio y el Tiempo, no cabe preguntar qué
existía antes, como tampoco tiene sentido hablar de qué hay más allá de los
confines del actual Universo. Igualmente el lugar, en que se registra la gran
explosión, está hoy en todas partes.
Explosiva
2ª: sólo difiere de la anterior al suponer que en la
gran explosión se formó el H. Elementos más allá del Hidrógeno se forman en
las estrellas, y más pesados que el hierro, pasando la materia por la onda
de choque de las supernovas.
La
diferencia entre estrellas de la Población I y II advierte que hay generaciones
de estrellas. Las primeras (jóvenes y blancas) tienen elementos más pesados, ya
que se formaron con productos de nucleosíntesis anteriores (residuos de
estrellas que explotaron). El Sol sería de 2ª o 3ª generación.
Para
ambas teorías hay dos posibilidades: que la actual densidad media de la materia
supere un valor crítico, de tal manera que la gravedad domine en el futuro la
expansión del Universo, obligándole a su contracción. Así el Universo
sería pulsante. O bien, que la densidad media de la materia no alcance el valor
crítico, por lo que las fuerzas de expansión dominarían, cayendo a un Universo
abierto. Si en el primer caso, la
curvatura del Espacio-Tiempo resulta positiva (Riemann), en el segundo
resultará negativa (Lobachevsky).
Teoría
Estacionaria: supone que el aspecto del Universo es el
mismo en cada época (uniformidad en el tiempo); ello supondría el nacimiento de
nuevas galaxias y por tanto de nueva materia (un átomo de H al año en cada 5 Km3
de volumen).
Conforme
se expande el Universo y conforme retrocedemos en el tiempo, la densidad de
galaxias resulta inmodificable. Ni habría principio ni habrá fin; sería un Universo
eterno y uniforme, pero en continua expansión.
|
Figura
63. Curvas de expansión de un Universo finito.
Una
contrapropuesta: nace enn el principio de Mach, según el cual
las partículas elementales aumentan de masa con sus interacciones. A mayor
tiempo mayor número de interacciones, mayor masa en las partículas elementales
y por lo tanto mayor atracción gravitatoria en el interior de los átomos y en
todas las macroestructuras atómicas. De lo anterior se desprende que el Universo
no se expande, simplemente sus componentes materiales disminuyen en
tamaño. El desplazamiento al rojo que
observa el astrónomo mide su empequeñecimiento y el de su telescopio. En tales
circunstancias, el radio del Universo es infinito, y para serlo, debe ser
eterno.
3.
EDAD DEL UNIVERSO >
Aún
los astrónomos no saben con exactitud la edad del Universo y menos si éste es
cerrado o abierto. La mayor parte admite que tenga 15 mil millones de años, y
prácticamente, todos admiten que se originó a partir de la gigante explosión.
Una
de las pruebas del Big Bang es la expansión que se deduce al observar el
corrimiento al rojo de las galaxias lejanas, hecho que nos lleva a un origen de
materia comprimida si retrocedemos en el tiempo. En tales circunstancias
deberíamos observar la luz de la gran explosión y deberían existir unos
determinados desechos en la composición química del Universo, a causa de las
reacciones nucleares ocurridas durante el paroxismo.
Ambas
evidencias se tienen, de un lado la radiación de fondo de 3°K
y de otro, las grandes cantidades de helio y las concentraciones de deuterio,
isótopo del hidrógeno, que está presente en todo el Universo en una proporción
de 20 a 30 partes por millón, confirmando que la temperatura, tres minutos
después de la explosión, estaba en el justo punto para facilitar que los
núcleos de deuterio se formaran, pues en las estrellas no pueden porque los
enlaces de un neutrón con un protón (deuterio) no son muy fuertes.
En
cuanto al origen del Universo caben tres posibilidades: 1) el Universo
existía de alguna forma antes del Big Bang. 2) El Universo fue creado en un
instante determinado. 3) Tanto el propio tiempo como el espacio fueron creados
con el Big Bang.
Ninguna
de estas posibilidades conduce a aclarar por qué la curvatura media del
espacio tiempo es tan próxima a cero. Las observaciones actuales nos dan un
error en la masa del Universo, entre diez veces y la décima parte de un valor
crítico, que se correspondería con curvatura cero. De no ser así, la velocidad
con la cual se ha expandido en los inicios (tiempo de Planck) no hubiese
alcanzado un justo valor cercano al valor crítico, con una precisión de uno por
1060, que permitiera el que la materia no se disipe tan velozmente,
como para no permitir la formación de
galaxias, ni tan lentamente, como para que la gravedad hubiera interrumpido
rápidamente la actual estructura que ofrece el Universo.
|
Figura
64. OA tiempo de Hubble (1/H); OB tiempo cósmico, Universo abierto; OC tiempo
cósmico Universo cerrado.
Conforme
se han determinado, con mayor precisión las distancias a las galaxias más
lejanas, se hizo necesario modificar la constante de Hubble. Como bien es
sabido, ella está dada por el cociente de la velocidad de recesión de una
galaxia y la distancia a la misma, en años luz.
Si
la distancia que nos separa de la galaxia B es el doble de la que nos separa de
la galaxia A, entonces la galaxia B se está alejando de nosotros con una
velocidad que el doble de la velocidad de la galaxia A. Esta relación, conocida como la Ley de
Hubble, se puede expresar así:
velocidad de recesión =
constante de Hubble x distancia
(Como
v = d/t , el inverso de la constante será tiempo).
En
el numeral 4 del capítulo 11, se ilustró la Ley de Hubble, mostrando la
expansión relativista del Universo. Se desprende de la Figura 61 que existe un
límite para el Universo observable, constituido por los cuerpos que viajan a la
velocidad de la luz.
Trabajando
en el tejido de expansión del Universo, para conocer su distancia, con el valor
H = 65 Km/s x Mpc, donde la velocidad alcanza el límite c, tenemos:
300000
Km/s = 65 Km/s x Mpc x radio
Teniendo
en cuenta que 1 parsec equivale a una distancia de 3.26 años luz, a fin de
obtener el valor del tiempo por la antigüedad de lo observado, calculamos la
distancia a la cual se encuentran los objetos más antiguos y lejanos, así:
radio
del Universo visible = 300000/65 x 106 x 3.26 años luz
radio
del Universo visible = 15000 millones años luz
De
esta manera, la edad del Universo, correspondiente a la constante de Hubble de
65 Km/s x Mpc y dada por el inverso de la constante H de Hubble es:
Tiempo
de Hubble = 15000 millones años
Rehaciendo
los cálculos indicados, con los valores de las distancias aceptadas
actualmente, el tiempo de Hubble es superior a la edad del Universo. En
tal caso el Universo sería abierto.
Surge,
ahora un nuevo problema, los datos confirmados por otras determinaciones
astronómicas, como la presencia de halos galácticos con materia poco luminosa,
sugieren que nuestro Universo sería el descrito por la Teoría de la Relatividad
General, y que se corresponde con un espacio cerrado. En tal caso su densidad,
necesariamente, debe superar un valor crítico, para que el espacio sea cerrado
y limitado.
A
partir de datos astrofísicos disponibles en la actualidad, aquella densidad
supera en una o dos veces a la densidad media de la materia condensada en
estrellas y galaxias. Ello conduce entonces a la posibilidad de que exista
materia perdida en el espacio cósmico, en forma de agujeros negros, por una
cuantía de entre 10 y 100 veces la materia observable.
Si
en el futuro se pudiera llegar a afirmar que esa masa perdida no existe en
realidad, habría que realizar una profunda revisión de las concepciones
teóricas actuales a pesar de su magnífica
Gonzalo Duque Escobar. P. As.
===
Manual de geología para ingenieros
Túneles excavados en rocas blandas
Ciencia, Tecnología & Sociedad, y Economía
===