Al paso que vamos la revolución no sólo esta
dando para cambiar las estructuras del estado al tiempo de fortalecerlas. Parece
que la revolución penetró tanto las estructuras que esta
produciendo incongruencias. Es posible que la dosis de revolución haya sido
muy alta, originando cambios que rayan en lo esotérico y
fantasmagórico. Están ocurriendo cosas muy extrañas y únicas, dignas de ser
estudiadas a profundidad.
En algunos sectores de la sociedad existe
una Revolución paralela que es pa'locos. Fíjense, ahora resulta que los
panfletistas son periodistas, los actores son locutores o dirigen programas de
opinión, los que dirigen programas de opinión son políticos, los políticos
son golpistas, y los golpistas no existen.
Y la cosa sigue: ahora los manifiestos
subversivos escritos, son periódicos, la publicidad se convierte en noticia
y la noticia en información clasificada. Una mentira en verdad y una
verdad en silencio. La iglesia en partido político, cuando no en un antro de
abuso y sumisión; un confidente en cardenal y un presidente en loco de atar. Los
adeptos al gobierno en hordas, las hordas en círculos bolivarianos, los círculos
bolivarianos en guerrilla urbana. Ahora el coco que vendrá y te comerá, ya no
hay que imaginarlo, son los temibles y horribles bolivarianos que por feos y de
piel oscura sirven para asustar a los inocentes niños de
nuestra sociedad.
Un revolucionario en conservador, un
conservador en traidor y un traidor en parlamentario; un amigo en
enemigo, un alcalde en policía, un policía en asesino. Un magistrado
en asalariado, una empresario en huelguista, y un trabajador en marioneta.
Un grupo de homosexuales no declarados, en partido político, un partido
político en grupo insurgente y una ONG en partido político como reducto de
zánganos y oportunistas.
Un militar en vende patria y un vende patria
en prócer. Directores(ras) de periódicos en serpientes, damas de la alta
sociedad en luchadoras por la dignidad, mujeres de pueblo en adoradoras del
diablo, ¿Y el diablo?, pues ya no es tan malo, ahora tan sólo es un ángel
expulsado del infierno, pero... ¿Y quién es el diablo ahora?, pues uno mucho
más malo todavía, ahora tiene una verruga en vez de cachos. ¿Y
los niños de la calle?, pues ya no son los harapientos y
destartalados "Gu-e -lepega", ni los sin hambre, ni aquellos que en cada
esquina o lugar aparecen con su mano extendida pidiendo una limosna, ahora
son los blanquitos, los de dientes perfectos, bien vestidos y muy sonreidos, son
aquellos de los que dicen tener ahora la calle en su poder, aquellos con
los cuales no se deben meter.
Cuanta metamorfosis Dios mío..!, eso es
lo que ocurre cuando los "pases" se suben a la cabeza. Creo que lo único
que faltaría es que la noche se vuelva día y en el día salgan los
vampiros... aunque pensándolo bien, eso también sucedió, porque de las
camisas y banderas negras, a salir por allí aleteando para encontrar a
quien chuparle la sangre, hay un pasito tan chiquitico como el que piensan
muchos que dieron, cuando gritan a boca abierta y a todo pulmón... Ni un paso
atrás..!
¿Será que Chavez invento una maquina
diabólica para convertir a tantos en tanto?. No lo creo..., tan sólo es que
comenzó el carnaval y no ha terminado, pero aún terminado... imagínense..!,
todavía faltaría la octavita...
Dios mío..! cuanta hipocresía de la buena,
regada por este mi país.
Adnan Abidar