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Historia de los Imperios: Antiguos y Modernos: Canada
Canadá Estado de América del Norte; 9.970.610 km2, 27.296.859 hab.
Cap. Ottawa. Limita al O con el océano Pacífico, al N con el océano
Glacial Ártico, al E con el océano Atlántico y al S con EE UU.
GEOGR. Geografía física. Canadá es, después de la República de
Rusia, el segundo país más extenso del mundo. Aproximadamente un 40 %
de sus tierras se hallan ocupadas por los bosques y, dentro de sus
límites, engloba un tercio de las aguas interiores que existen en la
Tierra. En el relieve canadiense se distinguen cinco grandes
regiones: en el extremo E, la región de los Apalaches, prolongación
del sistema montañoso norteamericano, que domina la fosa del San
Lorenzo; más al O, la llanura de Quebec y Ontario meridionales,
región contigua a los Grandes Lagos y la más industrializada de
Canadá; en la parte central y en el sector nororiental del país, la
amplia región del Escudo Canadiense, que rodea en forma de herradura
la bahía de Hudson, con un relieve de suaves colinas, que tan sólo en
el Labrador alcanzan altitudes notables (más de 2.000 m); al O del
Escudo, las grandes llanuras interiores, que son el inmenso «granero
de Canadá»; y en el sector O del país, la zona de las cordilleras:
las Montañas Rocosas, la Coast Range, junto al litoral, y, más al N,
los montes Mackenzie, Ogilvie y San Elías, donde se alza el techo
canadiense, el monte Logan, con 6.050 m de alt. Los cursos fluviales
y los lagos constituyen una de las principales riquezas del país,
tanto en su condición de fuentes de energía hidráulica como en su
calidad de grandes vías de comunicación. Entre los ríos cabe destacar
el Fraser, el Columbia y el Yukón, en la vertiente pacífica; el
Mackenzie (el de mayor longitud, con 3.800 km), que nace de la unión
del Peace y el Athabasca y desemboca en el océano Glacial Ártico; y
el San Lorenzo, que desagua en el Atlántico. Este último, junto a los
Grandes Lagos, en la frontera con EE UU (Superior -el segundo lago
del mundo, después del mar Caspio, en cuanto a extensión, con más de
82.000 km2-, Michigan, Hurón, Erie y Ontario) forma una de las
mayores arterias fluviales del mundo. Aparte de los lagos
laurencianos, destacan también el Gran Lago del Oso, el Gran Lago del
Esclavo, el Winnipeg y, con menor entidad, el Athabasca y el Caribou,
entre otros. Asimismo, Canadá cuenta con importantes formaciones
insulares, numerosas sobre todo en el Ártico (Territorios del
Noroeste: Baffin, Príncipe de Gales, Victoria, Banks, Ellesmere), si
bien abundan asimismo en el Atlántico (Terranova) y el Pacífico
(Vancouver, islas de la Reina Carlota). Por otra parte, la diversidad
climática explica la gran variedad en la vegetación: en el N, de
clima polar, predomina la tundra; más al S, las Montañas Rocosas no
dejan penetrar las influencias atlánticas y sólo el área de Vancouver
tiene un clima oceánico, de inviernos moderados; al E de la
cordillera, el clima es continental (seco en las Rocosas y húmedo en
la zona del Atlántico), con predominio de los bosques de coníferas, a
excepción de la parte central (praderas) y del área del San Lorenzo
(bosques caducifolios).Geografía humana. La mayor parte de la
población canadiense es de origen europeo: los «dos pueblos
fundadores» -el francés y el inglés-, junto a los neocanadienses
(inmigrados europeos de épocas más recientes: italianos, alemanes,
neerlandeses). Los grupos autóctonos de indios (345.975) y esquimales
(27.290) cada día se hallan más aislados. La dureza del clima polar y
el carácter inhóspito del relieve en el N del país explica que casi
el 90 % de Canadá se halle despoblado y que el 85 % de su población
habite la franja más meridional, a menos de 160 km de la frontera con
EE UU: de O a E, Vancouver, Calgary (710.677 hab.), Edmonton (839.924
hab.), Winnipeg (652.354 hab.), Toronto (3.893.046 hab.), Ottawa
(920.857 hab.), Montreal (3.127.242 hab.) y Québec (645.550 hab.),
son las principales aglomeraciones urbanas de un país notablemente
urbanizado (la población urbana supone el 77 %). Por tanto, la débil
densidad de 2,7 hab./km2 es poco ilustrativa de la realidad
demográfica, debido a los grandes contrastes que existen entre el N y
el S del país.Geografía económica. Canadá es uno de los pocos países
de economía capitalista avanzada en donde los recursos naturales, muy
abundantes, todavía no han sido explotados en su totalidad. Este
hecho, unido a la proximidad del mercado estadounidense, contribuye a
explicar la prosperidad de la economía canadiense que ha situado al
país entre los más ricos del mundo. En el Escudo Canadiense,
principalmente, se localizan los mayores yacimientos mineros del
país. Canadá es el primer productor mundial de cinc (1.311.900 de t
de metal contenido) y de uranio (8.100 t); el segundo de níquel
(191,1 miles de t), y figura entre los primeros productores de
hierro, potasa, cobalto, platino, molibdeno, magnesio, plomo, cobre,
estaño, oro y plata. Insuficiente resulta, en cambio, su producción
de carbón (que importa de EE UU), situación que se compensa en buena
parte con la gran producción de gas natural (la tercera del mundo,
con 809.000 t) y de petróleo (75,9 Mt). Otros notabilísimos recursos
naturales son la explotación forestal (entre las diez primeras
producciones mundiales de madera y papel) y la actividad pesquera (
bacalao en los bancos de Terranova; salmón en el Pacífico). La
expansión industrial, basada en la gran riqueza del subsuelo y la
disponibilidad de energía a bajo coste (gran potencial hidráulico),
se localiza principalmente en las provincias de Ontario, Quebec y
Columbia Británica; la siderurgia (13,9 MT de acero) alimenta la
fabricación de automóviles y la ind. de construcciones mecánicas; la
metalurgia, el sector industrial más importante (tercera producción
mundial de aluminio, con 1.9 Mt), se concentra casi exclusivamente en
Ontario, provincia que reúne el 40 % del PIB nacional y cuya capital,
Toronto, es el centro económico y financiero del país; otras
destacadas ramas industriales son la alimentaria, la textil, la
química y la electrónica, que se emplazan, sobre todo, en la región
de los Grandes Lagos y del San Lorenzo. En la actividad agropecuaria,
altamente mecanizada, destacan los cultivos extensivos de cereales en
las Praderas: trigo -del que Canadá es uno de los primeros
productores y exportadores del mundo-, cebada y avena. El sector
terciario ocupa al 71 % de la población activa del país: la economía
canadiense, de eminente carácter exportador (automóviles y sus
componentes, papel, petróleo, madera, gas natural, trigo, aluminio,
cobre, mineral de hierro, etc.), se beneficia de la necesidad
energética de las potencias occidentales, pero, en contrapartida, se
ve perjudicada por la dependencia respecto a EE UU, principal socio
comercial (el 70 % de las exportaciones y las importaciones), que
controla buena parte de sus sectores clave (100 % del aluminio, 96 %
de la ind. del automóvil). Su balanza comercial, equilibrada, e
incluso excedentaria (en 1992, importaciones por valor de 126.003
millones de dólares. frente a los 134.056 millones de dólares de las
exportaciones), resultó muy perjudicada con la crisis de los primeros
años ochenta, la peor experimentada por el país en medio siglo. Pero
fue algo pasajero, y Canadá sigue siendo una de las primeras
potencias mundiales, con una economía extraordinariamente saneada.
HIST. Exploración. Hacia el año 1000 llegaron a las costas de
Terranova los vikingos provenientes de Groenlandia, donde se había
establecido en 986 Erik el Rojo. Es posible que desde antes del viaje
de Colón pescadores europeos frecuentaran estas aguas, de abundante
pesca. En 1497, Juan Caboto, con el patrocinio de Enrique VII de
Inglaterra, partió del puerto de Bristol con el fin de encontrar una
ruta a Catay por el N, y llegó a la isla de Cabo Bretón el 24 de
junio. La colonia francesa. El proyecto fue reanudado años más tarde
por el bretón Jacques Cartier, quien exploró en 1534 el golfo del San
Lorenzo, cuyas riberas reclamó para la corona francesa. Al año
siguiente remontó el río San Lorenzo. En 1541, Francisco I nombró
teniente general de los territorios norteamericanos a De Roberval,
quien fundó al año siguiente una colonia en Charlesbourg-Royal, que
abandonó al poco tiempo desalentado por no haber encontrado ni oro ni
piedras preciosas. Desde entonces y durante mucho tiempo los únicos
atractivos del Nuevo Mundo fueron la pesca y el comercio de pieles
con los indios. Después de fundar Port-Royal (1604) en Acadia, De
Monts, director de la Compañía Francesa del Canadá, y Samuel de
Champlain fundaron Quebec en 1608. En 1608, buscando la vía al
Pacífico, Henry Hudson descubrió el río que lleva su nombre, y en
1611 llegó al estrecho y la bahía del mismo nombre. Después de la
destrucción de las colonias francesas en Acadia por los ingleses de
Virginia, William Alexander fundó en 1628 una colonia de escoceses en
ella, que pasó a llamarse Nueva Escocia, mientras Richelieu
organizaba la Compañía de la Nueva Francia. La rivalidad anglo-
francesa, tanto comercial como religiosa, se agravó con la creación
de las Compañías de la Bahía de Massachusetts (1629) y de la Bahía de
Hudson (1668). Con las guerras del rey Guillermo (1689-1697), de la
reina Ana (1702-1714), del rey Jorge (1743-1748) y francesa e india
(1754-1763), extensiones americanas de las guerras dinásticas,
religiosas y comerciales de las potencias europeas, todos los
territorios de la Nueva Francia pasaron a depender de Gran Bretaña,
constituyendo la colonia de Quebec.La colonia británica. La mayoría
de los 70.000 colonos franceses resolvieron continuar en Quebec, y
por su parte los gobernadores británicos (James Murray, Guy Carleton)
aconsejaron conservar el carácter francés de la colonia para contener
el creciente malestar de las colonias del S. El Acta de Quebec de
1774 amplió sus fronteras incluyendo los territorios de Ohio y
Mississippi, autorizó el culto católico y adoptó el francés, junto
con el inglés, como lengua oficial. El Acta fue un factor que ayudó a
desencadenar la rebelión de las colonias inglesas: la primera medida
del Congreso Continental Americano de 1775 no fue la declaración de
independencia, sino la invasión de Quebec. Concluida la guerra de
independencia (1783), la mayoría de los colonos británicos que se
habían mantenido leales a la metrópoli se refugió en Nueva Escocia,
Nueva Brunswik, la isla del Príncipe Eduardo y Ontario. La llegada de
los «leales» modificó drásticamente la composición de la población
canadiense; a ello se sumó el flujo creciente de nuevos inmigrantes:
irlandeses, escoceses, ingleses y alemanes. Frente a este mosaico de
nacionalidades, y de religiones, y habiendo estallado la Revolución
francesa, el gobierno británico dictó el Acta Constitucional de 1791,
que establecía una colonia del Canadá Superior, con mayoría
francoparlante, y otra del Canadá Inferior, conservando las
prerrogativas otorgadas a los franceses en 1774. Al firmarse la paz
entre EE UU y Gran Bretaña, la frontera al O de los grandes lagos se
había fijado en el paralelo 49. La división del continente
intensificó la rivalidad entre los traficantes de pieles. Organizados
en la Compañía del Noroeste, los comerciantes de Montreal continuaron
la exploración hacia el O y el N. En 1789 Alexander Mackenzie llegó
al Ártico por el valle que lleva su nombre, y más tarde alcanzó el
Pacífico. En 1812 David Thompson llegó a la desembocadura del
Columbia, donde se encontró con los estadounidenses, que le
precedieron. Las fricciones llevaron a la guerra (1812-1814), que
concluyó con el Tratado de Gante (1814). Un nuevo tratado (1846)
confirmó la frontera del paralelo 49 hasta el estrecho de Georgia,
mientras la isla de Vancouver continuaba siendo británica.El dominio
de Canadá. Tras varias rebeliones frustradas, el gobierno británico
envió a lord Durham como gobernador para estudiar las causas del
malestar. Éste recomendó la unión de las colonias y la concesión de
una mayor autonomía, para consolidar la naciente nación. En 1867 se
promulgó la British North America Act, que unía las provincias de
Nueva Escocia, Nueva Brunswick, Alto Canadá (Ontario) y Bajo Canadá
(Quebec) en una confederación, que tomó el nombre de Dominio de
Canadá. La constitución preveía la incorporación de nuevas
provincias, adoptaba una organización política basada en el modelo
británico y confirmaba los derechos de la comunidad francesa. Los
territorios controlados por la Compañía de la Bahía de Hudson se
incorporaron en 1870, previa indemnización, pero en el valle del Red
River vivía una importante comunidad mestiza, católica y de habla
francesa, que se consideraba una nación. La rebelión de los mestizos,
encabezada por Louis Riel, llevó a la creación de la nueva provincia
de Manitoba (1870), con un estatuto similar al de Quebec. El
descubrimiento de oro en 1858 en el río Fraser había motivado la
creación de la colonia de Columbia Británica, que se incorporó a la
confederación en 1871. Con ella, Canadá se extendía del Atlántico al
Pacífico, con un amplio territorio indio intermedio, donde entre 1905
y 1912, después de sofocar la segunda rebelión de Louis Riel, se
formaron las provincias de Alberta y Saskatchewan, y Nueva Gales del
Sur, que se integró en Manitoba. La última provincia que se incorporó
fue Terranova (1949). Desde un principio, la confederación estuvo
gobernada por los partidos Liberal y Conservador. Hasta 1896
gobernaron los conservadores, siendo su figura más destacada John
Macdonald. En 1896 comenzó un período liberal (W. Laurier), durante
el cual se descubrió el oro del Yukón. La contribución canadiense en
la guerra de los bóers (1899-1902), casi simbólica, y otras medidas
de apoyo a la política colonial británica, activaron la discrepancia
de la comunidad francesa, conducida por Henri Bourassa. Pero la
participación activa en la I Guerra Mundial le valió consideración
internacional de Estado independiente, que se concretó en el Estatuto
de Westminster (1931), que amplió su autonomía y le autorizó a
conducir su propia diplomacia. Tras su participación en la II Guerra
Mundial comenzó un período de expansión y prosperidad, en el que se
estrecharon los lazos políticos, económicos y militares con EE UU. En
1949 ingresó en la OTAN. Los liberales gobernaron desde 1935 hasta
1957 (Mackenzie King, Saint-Laurent), fecha en que tomaron el poder
los conservadores con John Diefenbaker. En 1963, Lester Pearson
(premio Nobel de la paz) formó un gobierno en minoría. Los liberales
retornaron con Pierre Trudeau (1968-1979), que se abocó a resolver el
problema de Quebec, avivado por De Gaulle (1967). En 1982, la reina
Isabel II proclamó en Ottawa una nueva Acta Constitucional, que
concedía a Canadá plena independencia, dentro de la Commonwealth. En
1984 Trudeau renunció y fue sucedido por John Turner, quien convocó
elecciones de inmediato, que ganaron los conservadores con Brian
Mulroney, reelegido en 1989. A todo esto, el problema planteado por
las reivindicaciones nacionalistas de Quebec quedaba sin resolver. En
el referéndum del 26 de octubre de 1992 los canadienses rechazaron
por un 54,4 % de votos la reforma constitucional que preveía una
situación política especial para Quebec y un nuevo reparto de
competencias entre el poder central de Ottawa y las provincias, y el
30 de octubre de 1995, el 50,6% del electorado de la provincia
francófona votó en contra de la secesión, frente a un 49,4% favorable
a la independencia. En junio de 1993 Mulroney presentó la dimisión, y
fue nombrada primera ministra la conservadora Kim Campbell, que fue
sustituida por Jean Chrétien, líder del Partido Liberal, tras las
elecciones de octubre de 1993. Dos fuerzas emergentes en estos
comicios fueron el Bloque Quebequés, que propugna la separación de la
provincia francófona, y el Partido para la Reforma, fundado por el
populista Preston Manning, muy crítico con los independentistas. En
las elecciones de junio de 1997 los liberales obtuvieron de nuevo la
mayoría parlamentaria, lo que permitió a Jean Chrétier renovar su
cargo, y el Partido para la Reformase consolidó como la segunda
fuerza parlamentaria.
DiegoyGabriel@aol.com