Martí en el recuerdo
Martí: la ciencia y la técnica.

Ciencias Agropecuarias.

El desarrollo de la ciencia y la técnica en la segunda mitad del siglo XIX se refleja no sólo en la producción industrial sino también en la organización de las ciencias agropecuarias. El interés por esta ciencia tiene sus bases desde su estancia en México y Guatemala, puesto que él vio el desarrollo de estos países y en general de toda América en el desarrollo agropecuario. Mostró gran preocupación por el desarrollo de esta ciencia y la utilización de la Química en la misma por eso planteó: "Siémbrese química y agricultura y se cosecharán grandeza y riqueza".

En septiembre de 1883 aparece publicado en “ La América” un artículo acerca de las posibilidades del cultivo de la uva y el consecuente fenómeno de la industria vinícola como otra alternativa económica para nuestros pueblos y alentado por su fe en nuestra aptitud para estabilizar la calidad en la producción vinícola afirma: "Nuestra América, apenas lo quiera, producirá buenos vinos, (...) para vid buena, espíritu caliente y sol brillante”. ( O.C. T 8, Pág. 304)

En la revista "La América" publica diferentes artículos acerca de las exposiciones de ganado y caballos en las cuales expone todos los adelantos obtenidos en esta esfera, principalmente en el cruce de razas y en la importancia económica que significaba para América el desarrollo en esta esfera. 

Con motivo de una exhibición de flores en Nueva York, Martí envía una crónica al periódico “ La Nación” de Buenos Aires, fechada en Nueva York el 28 de noviembre de 1890 en la que describe todas las especies mostradas en lo que era realmente una gran exhibición de plantas ornamentales. El trabajo periodístico incluye la reseña de más de 70 especies diferentes, entre flores y plantas, muchas de ellas aludidas por su nombre botánico.

La tabla martiana de valores, remitida siempre a la especificidad de nuestra América, refleja insistentemente la necesidad de la diversificación agrícola en nuestros países signados por el monocultivo porque “... tierra, cuanta haya debe cultivarse y con varios cultivos, jamás con uno solo” (O.C., T 13, Pág. 514-515).

Sobre los pilares del trabajo agrícola y la instrucción sustenta Martí sus esperanzas de bienestar y crecimiento para los pueblos de nuestra América.