Estudio vegetacional y de vertebrados de la zona de Aguila Sur (Sector Angostura de Paine, R.M) (*).La composición florística y la fisionomía o estructura de un paisaje cambia gradualmente de un área a otra; las características de los factores físicos que determinan a los ambientes cambian, a menudo en distancias muy cortas. Como resultado de esto, las combinaciones de especies (o comunidades), pueden ser muy numerosas, tanto como en el número de posibilidades ambientales, que también puede ser muy diverso. Pero, tras el aparente desorden visible de la diversidad del paisaje hay un patrón de ordenación. Las características de los factores ambientales en un lugar determinado (clima, sustrato, etc.), establecen una matriz de elementos ecológicos que es únicamente compatible con las exigencias de un cierto número de especies. Sólo podemos esperar encontrar en ese lugar el conjunto de especies que para él son adecuadas. Edafología apreciable de la Zona:Las características del suelo hacen sospechar que se trata de un suelo del tipo variante entre Vertisol, por su altísimo contenido de arcilla, mostrando profundas grietas producto de la sequía, junto a pequeñas cárcavas producto de la lixiviación; y Andisol, encontrándose evidencia volcánica en la zona. No se realizaron calicatas para determinar los horizontes o estratas del suelo. En algunos sectores (entrada sur), se aprecia un suelo con características de suelos graníticos aluviales. El pH del suelo variaría (coms. pers.) entre 6,5 y 7,0. No se realizó determinación de pH en terreno. La humedad del suelo corresponde a un régimen xérico. Vegetación de la Zona:Se efectuó una descripción de la biota presente en el área potencialmente afectada por la instalación del proyecto Relleno Sanitario El Calán, sobre la base de observaciones de terreno, complementadas y corroboradas con antecedentes bibliográficos. El trabajo de terreno fue realizado entre los días, 13, 14, 19, 20, 21 de Mayo del 2001. No se realizaron muestreos estadísticos, solo observaciones visuales. En una región con una tan alta diversidad vegetacional, las formas de vida que se encuentran son variadas. Predominan los arbustos altos de hojas esclerófilas, pero también se encuentran arbustos bajos xerófitos, arbustos espinosos, suculentas y árboles esclerófilos y laurifolios con gran desarrollo en altura. Los paisajes vegetales presentes son complejos por diferentes razones. En primer lugar, es la parte del territorio nacional que tiene la mayor densidad de población, lo cual se refleja en un alto grado de alteración de las comunidades vegetales, al extremo que podría afirmarse que son excepcionales las muestras de la vegetación original. En segundo lugar, es un área que se encuentra en una posición latitudinal de transición climática, lo que sumado a la existencia de un relieve montañoso, permite una fuerte interpenetración con las regiones vegetacionales adyacentes. En tercer lugar, la presencia en el sector costero de comunidades vegetacionales de caracter relictual, provoca la participación de un conjunto de elementos florísticos de difícil interpretación. Zona de Matorral y Bosque Espinoso:Corresponde a una unidad vegetacional que ha sido profundamente afectada por las actividades humanas, tanto que sus formaciones vegetales se presentan muy heterogéneas en su composición florística y en su estructura espacial. Pero persisten elementos de su condición original, relegados a ambientes muy particulares en sus características físicas, en especial sobre sustratos vertisólicos, con altos contenidos de arcillas y sobre suelos pedregosos, propios de los planos inclinados originados en los coluvios de las áreas montañosas. Las formas de vida predominantes es aquella de los arbustos fuertemente espinosos, a menudo del tipo suculento o caducifolio de verano. La delimitación de esta zona sigue siendo en gran medida la distribución del espino (Acacia caven). Acacia caven - Lithrea caustica. Comunidad Espino - litre.Comunidad de origen secundario, que está fuertemente intervenida por la acción humana. La flora característica es la siguiente (en orden de importancia, basado en apreciaciones visuales del sector). El siguiente listado fue confeccionado con las especies encontradas al interior del sitio donde se asentaría el relleno sanitario denominado "El Calán". Existen otras comunidades vegetacionales que colindan con el sector, y poseen especies que se encuentran con problemas de conservación, como es el caso del Lingue del Norte (Persea meyeniana), especie que posee una pequeña comunidad en las inmediaciones del mencionado sector, o como el caso del hualo (Nothofagus glauca), especie que se encuentra al interior del área donde se asentará el futuro el proyecto "Santuario Altos de Cantillana", el que formará parte del patrimonio biológico nacional conservado por el Servicio Nacional de Areas Protegidas del Estado (SNASPE). Este santuario se encuentra formando parte del mismo cordón montañoso que colinda con el proyecto. Las especies con problemas de conservación en Chile se encuentran listadas en el "Libro rojo de la Flora terrestre de Chile" (Benoit, 1989).
Fauna susceptible de encontrar en la zona de estudio:Se efectuó una descripción de la fauna de vertebrados presente en el área potencialmente afectada. Los invertebrados presentes en la zona de estudio no fueron considerados debido a los insuficientes datos de los que se dispone. El estudio se realizó en base a observaciones visuales de la macrofauna presente en el sector, y a censos de entomofauna efectuados en las inmediaciones del área en cuestión (Aguila Sur), desde hace 3 años a la fecha. Estos censos ornitológicos están insertos en el marco educacional del proyecto "Escuela Verde, formación de monitores ambientales, de la corporación El Canelo de Nos. Las especies características determinadas en la zona son las siguientes: Peces continentales:No hay referencias en la zona de estudio de peces continentales. En los pequeños canales aledaños han sido observados ejemplares de "Gambusia"; Gambusia affinis, o G. Holbrokii. El río Angostura es especialmente abundante con ejemplares de pejerrey chileno (Cauque spp.) y salmonídeos introducidos (Salmo spp). Cauque spp, es un género que está con problemas de conservación (Glade, 1993).
Anfibios:Pleuroderma bibroni, y Bufo chilensis son las únicas especies encontradas. El "sapo de rulo" (B. chilensis), es particularmente abundante en la zona aledaña a la de estudio (sector montañoso de Aguila Sur). La otra especie determinada, el "sapito de cuatro ojos" (P. thaul), es abundante en la zona de estudio. Hay grandes posibilidades que existan más especies de los géneros Alsodes, Batrachyla, Bufo, y Caudiverbera, que no fueron halladas mientras se hizo el estudio. Tambien se sospecha de la presencia del exótico y agresivo sapo africano Xenopus laevis en las inmediaciones, ya que ha sido colectada en el sector de Aculeo (norte), y San Francisco de Mostazal (sur). Ambas localidades distan solo unos pocos kilómetros del lugar del estudio, por lo que presumiblemente se le incluye entre la amphibiofauna del sector. De todas estas especies, el Sapo de Rulo es el único que está considerado como "Vulnerable" por "El libro rojo de los Vertebrados terrestres de Chile". (Glade, 1993).
Nota: El símbolo (+) indica que se trata de una especie altamente probable en el sector, pero no se determinó un registro visual de la misma. Reptiles:Los reptiles, son un pequeño grupo de vertebrados, pero con 55 especies endémicas. El endemismo es alto al nivel de los saurios. Philodryas chamissonis y Tachymenis chilensis son las únicas especies de Colubridae presentes en la zona de estudio. La culebra de cola corta (T. chilensis), ha sido vista un par de veces en la zona de estudio, sin ser mayormente abundante. La culebra de cola larga (P. chamissonis), ha sido vista solo una vez al interior de la zona, pero es abundante en la zona de Aguila Sur, donde ha sido observada en varias oportunidades. Ambas especies están consideradas como "vulnerables" para Chile (Glade, 1993). Entre los saurios chilenos, solo ha sido posible observar ejemplares del género Liolaemus, no descartándose la posibilidad que Callopistes palluma se encuentre también. Han sido vistos ejemplares de L. gravenhorsti en forma abundante,así como tambien bastantes más ejemplares de L. nitidus, L. lemniscatus, L. fuscus, y L. tenuis. Esto no descarta la posibilidad que existan otras especies del género Liolaemus presentes en la zona de estudio. Muchas de estas especies están con problemas de conservación, como es el caso de L. gravenhorsti, considerada en peligro de extinción por sus bajas densidades poblacionales. (Glade, 1993.).
Nota: El símbolo (+) indica que se trata de una especie altamente probable en el sector, pero no se determinó un registro visual de la misma. Aves:Las aves, son el segundo grupo más numeroso de vertebrados en Chile, constituyendo un cuarto del total de especies de vertebrados nativos. Entre las especies censadas durante la realización del proyecto "Escuela verde", en forma frecuente está: diuca, (Diuca diuca), treile o queltehue (Vallenus chilensis), chincól (Zonotrichia capensis), perdíz (Nothoprocta perdicaria), loica (Sturnella loyca), tórtola (Zenaida auriculata), torcaza (Columba araucana), picaflor gigante (Patagona gigas), picaflor común (Sephanoides galeritus), tordo (Curaeus curaeus), jilguero (Carduelis barbatus), diucón (Pyrope pyrope), zorzal (Turdus falcklandii), y el colegial (Lessonia rufa), visto solo una vez, juntamente con el sonido del pitío (Colaptes pitio), escuchado un par de veces al interior del bosque a lo largo de los tres años que se han hecho las observaciones, no habiendo registro visual del mismo. Especies introducidas como la garza boyera (Bubulcus ibis), codorníz (Callipepla californica), y mirlo (Molothrus bonariensis), se encuentran en forma abundante. Entre las rapaces, ha sido vista en forma frecuente el tiuque (Milvago chimango), peuco (Parabuteo unicintus), halcón peregrino (Falco peregrinus), y cernícalo (F. sparverius). Una sola vez ha sido divisada un águila (Geranoaetus melanoleucus). Entre las rapaces nocturnas, se han divisado tucúqueres (Bubo virginianus) en forma frecuente. No hay indicios de otros Stirgiformes en la zona de estudio. Muchas de estas especies presentan problemas de conservación, en especial las aves rapaces, debido básicamente al envenenamiento provocado por agrotóxicos (altos niveles concentrados en sus presas más comunes), y a la intervención humana, que ve en estas aves un peligro potencial para sus aves domésticas. La tórtola, está recuperando sus poblaciones, las que fueron diezmadas por la introducción de una enfermedad viral exótica, décadas atrás, lo que amerita resguardar sus poblaciones, estando aún en peligro de extinción, según Glade (1993).
Nota: El símbolo (+) indica que se trata de una especie altamente probable en el sector, pero no se determinó un registro visual de la misma. Mamíferos:La taxonomía y sistemática de la mastofauna chilena están sólidamente establecidas. La taxonomía y sistemática de los micromamíferos están bastante cimentadas. Las investigaciones sistemáticas sobre micromamíferos se han enfocado actualmente hacia mayores detalles de evolución de grupos específicos. Los mamíferos resultan un grupo muy diverso. Sus 147 especies constituyen el 3,6 % del total de mamíferos vivientes. Resulta notable también su alto grado de endemismo, siendo principalmente las especies terrestres, (Spotorno, 1995). El conocimiento de la fauna actual de mamíferos sudamericanos es pobre; sin embargo, dentro de este contexto, el conocimiento de los mamíferos presentes en Chile es relativamente bueno, pero el avance que se está logrando en otros países del área pronto superará el existente para el nuestro Sobre los quirópteros presentes en Chile hay poco publicado. El estado de conservación no está diagnosticado, en el Libro Rojo de los Vertebrados Terrestres de Chile (Glade, 1993). Esto indicaría que hasta la fecha de publicación no se encontrarían con problemas de conservación, situación que perfectamente puede haber cambiado. Las observaciones en terreno de los quirópteros fueron realizadas mediante observación de comportamiento social (Lasiurus borealis), y mediante capturas para identificación (L. cinereus, Hystiotus montanus). En el caso de L. borealis es bastante fácil su identificación, ya que además de ser el único quiróptero de comportamiento solitario, su color rojizo es bastante llamativo. Es una especie relativamente abundante en el sector. Las poblaciones de L. cinereus y H. montanus por el contrario, son escasas. Para las correctas identificaciones de estas especies, se utilizó la clave de quirópteros nativos que se encuentra a disposición en este web Site. La especie Marmosa (=Thylamys) elegans ha llegado a Chile como un invasor de tierras tropicales, distribuyéndose en la actualidad por un vasto sector geográfico que abarca desde nuestra frontera septentrional a los bosques valdivianos, desde el nivel del mar, hasta unos 2.500 metros, aproximadamente (Campos, 1993). Esta especie sería al único marsupial factible de ser encontrado en la zona de estudio, de hecho se observaron rastros de anidaciones de este marsupial entre las ramas de Acacia caven. Los carnívoros chilenos están contenidos en tres familias: Felidae, Mustelidae y Canidae. Las dos primeras familias contienen especies con gran estabilidad nomenclatural, presentan escasa diversidad y se sabe muy poco en cuanto a su distribución. El caso de los cánidos es el opuesto. Actualmente, se los reconoce dentro del género Pseudalopex. , encontrándose 2 de las 3 especies en la zona de estudio, el chilla y el culpeo (P. griseus y P. culpaeus). Zorro chilla ha sido visto sólo en una ocasión en los faldeos cordilleranos hace un par de años, pero gente de la zona confirma que ha sido visto mas veces. El caso del zorro culpeo es distinto. Es abundante en toda la zona, habiendo sido observado en varias oportunidades, lo que presume que el número de roedores en la zona debe ser altísimo. Poco se sabe con relación a los pequeños felinos chilenos. Se tiene conocimiento de pequeños felinos en la zona cordillerana (Oncifelis spp.), pero por no haber sido vistos en persona se desconoce de que especie puede tratarse. El representante de la familia Mustelidae en la zona de estudio, corresponde al Quique (Galactis cuja), que ha sido visto, pero en pocas oportunidades. Personalmente se confirmó la presencia de este mustélido, por haberse encontrado un esqueleto con gran parte del cráneo del mismo hace un par de años, en las laderas aledañas del cordón montañoso. Es interesante destacar que todos los carnívoros presentan problemas de conservación. Esto es debido principalmente a la presión de caza ejercida sobre ellos por parte del ser humano, como protección, deporte, y explotación comercial. Se desconoce por completo el valor ecológico y biológico que tienen estas especies para su ecosistema. Existe la idea por parte de los pobladores locales de implementar un plan de explotación eco-turística de esta mastofauna, como ha empezado a ocurrir en otras áreas de nuestro territorio, como los bosques de la zona sur, por ejemplo, donde ya se ha iniciado la implementación de eco-tours, turismo aventura, y safaris fotográficos. En Chile no existen perisodáctilos nativos, por lo que todos los ungulados chilenos son artiodáctilos. No hay datos de asilvestramientos en la región, ni de la presencia de especies nativas. Los roedores y lagomorfos en la zona son abundantes, lo que da como resultado un alto número de predadores en la zona. Se observaron poblaciones abundantes de Ratoncitos oliváceos (Abrothrix olivaceus) y lauchones de Darwin (Phyllotis darwini), algunos ejemplares de degú (Octodon degus), raton de los espinos (Oligoryzomys longicaudatus), ratones comunes (Rattus rattus) y conejos (Oryctolagus cuniculus). No se constató la presencia de liebres (Lepus capensis) ni vizcachas (Lagidium viscacia), aunque se tenía información de su presencia en localidades del sector por parte de los lugareños. Especies como ratón chinchilla (Abrocoma benetti) y ratoncito sedoso (Abrothrix longipilis), se cree deben encontrarse por las condiciones de distribución del sector. Sin ninguna duda existen más especies de cricétidos presentes en el sector, pero sin la utilización de Trampas Sherman u otro método de captura, es imposible llegar a determinarlo. El estado de conservación de los mamíferos nativos presentes en las zonas de estudio, está dado en la recopilación de Glade (1993), situación que a la fecha se ha hecho más insostenible, por la intensa presión antrópica que sufren los bosques de la zona de intervención, por lo que urge cambiar el uso de aquellos lugares a turismo o esparcimiento, en el ideal de los casos, o a una forma de uso que requiera un impacto antrópico mínimo, antes que la única flora y fauna que podamos encontrar y conocer sea ruderal.
Nota: El símbolo (+) indica que se trata de una especie altamente probable en el sector, pero no se determinó un registro visual de la misma. Recomendaciones:La biodiversidad presente en Chile central es bastante frágil. El bosque esclerófilo es uno de los ecosistemas más intervenidos de Chile, principalmente debido a la política de laissez faire, el dejar estar y no actuar. La historia del paisaje de Chile central, desde la llegada de los conquistadores españoles hasta nuestros días, tiene mucho que enseñarnos con respecto a lo que puede suceder con los paisajes de cualquier parte del país si se sigue con la política de laissez faire, sin mayor preocupación por los procesos a ese nivel, no existiendo actualmente ningún ecosistema en Chile central que no presente algún grado de intervención antrópica. La vegetación es componente importante de la fisionomía del paisaje de Chile central, y parte fundamental del hábitat de la vida silvestre (zorros, culebras, lagartijas, aves, etc.). Lo que se sentía al mirar la fisionomía del paisaje, con sus cerros cubiertos de bosques, debe haber sido muy distinto de lo que sentimos hoy al ver estos mismos cerros con una cubierta rala de arbustos y con un aspecto desertificado. La vegetación boscosa conjuntamente con la fauna es pues, un recurso en sí, un componente fundamental e importantísimo de la economía natural, y un descriptor relativamente sencillo del estado de un paisaje. La destrucción de la biodiversidad puede justificarse diciendo que debe destinarse la basura en alguna parte, que la gente tiene que vivir, que debe dársele empleo, es algo con lo cual es imposible no estar de acuerdo. Lo que no parece adecuado, sin embargo, es que tenga que ser así, ahora, a principios del siglo XXI, cuando la economía parece ser tan floreciente en algunas partes. Lo que antes pareció una explicación tan satisfactoria, no puede continuar siéndolo ahora. No podemos iniciar un grave conflicto ambiental, que involucre a la frágil biodiversidad que ha sobrevivido el desarrollo tecnológico, solo para poder tapar otro grave conflicto, la generación de desperdicios, que el mismo desarrollo tecnológico nos ha hecho generar. (*)Fuente y Referencias Bibliográficas:
Cristian
Pérez Apablaza
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