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Los fundadores del
Ateneo de Montevideo |
1 |
Acevedo Díaz, Eduardo |
2 |
Artagaveytía, Adolfo |
3 |
Berguiduague, Martín |
4 |
Berra, Francisco |
5 |
Blanco, Juan Carlos |
6 |
Bustamante, Pedro |
7 |
De María, Dermidio |
8 |
De María, Pablo |
9 |
Denis, Claudio |
10 |
Desteffanis, Luis Daniel |
11 |
Ellauri, Plácido |
12 |
Filippone, Florentino |
13 |
Giralt, Pablo |
14 |
Grané, Ovidio |
15 |
Gradín, Carlos |
16 |
Granada, Daniel |
17 |
Herrera y
Obes, Julio |
18 |
Magariños
Cervantes, Alejandro |
19 |
Lafinur,
Luis Melián |
20 |
Muñoz, Daniel |
21 |
Narvaja, Tristán |
22 |
Pedralbes, Adolfo |
23 |
Pedralbes, Ignacio |
24 |
Pena,Carlos María |
25 |
Pérez, Gregorio |
26 |
Ramírez, Carlos María |
27 |
Ramírez, Gonzalo |
28 |
Requena, Joaquín |
29 |
Rodríguez
Larreta,
Aureliano |
30 |
Tavolara, José Antonio |
31 |
Terra, Duvimioso |
32 |
Varela, José Pedro |
33 |
Vidal y Colón,
Guillermo |
NARVAJA, Tristán
(Córdoba de Tucumán,
Argentina, 1819- 1877). |
Abogado, codificador y Ministro de Estado del Uruguay,
nacido en Argentina. En vista de su papel en la jurisprudencia nacional el
gobernador provisorio general Flores decidió concederle la ciudadanía
legal, en febrero de 1868. Unos meses después acepta ser designado
colaborador honorario del Club Universitario, que lo tenía como uno de
sus referentes académicos. Se graduó en Derecho Civil y Canónico en su
ciudad natal (1836). Tres años después emigró a Buenos Aires, en el período
rosista, para inscribir su título en la curia porteña. Perseguido por la
policía del dictador huyó hacia Montevideo, donde pasa a integrar la
Academia de Jurisprudencia (1841). Unos años después se aleja de
Uruguay, para viajar por Argentina, Chile y Bolivia. En el 53 regresa a
nuestra capital incorporándose a la Universidad como docente de distintas
asignaturas. En 1866 concluye un el proyecto de Código Civil, aventajado
para la época, que Venancio Flores declará Código Civil de la República
(1868). Unos años después Narvaja es constituido miembro del Superior
Tribunal de Justicia, y en la presidencia del Dr. Ellauri se le nombra
entre los redactores del Código de Procedimiento Civil. En su desempeño
como Ministro de Gobierno durante la presidencia de Pedro Varela, insiste
en la necesidad de que no se deje de enseñar doctrina cristiana como
primera asignatura (1874), posición que lo opone al pensamiento liberal
vareliano que reclama una enseñanza laica. Las dificultades políticas y
sociales que vive el país en ese momento lo llevan a renunciar a su
ministerio en el 76, un año antes de su muerte.
Desde el año 65 la Universidad había entrado en una nueva etapa una
vez normalizada su situación jurídica. Se renueva parcialmente el cuadro
docente, dando oportunidad a que ingresen varias personalidades que estarán
vinculadas al Club Universitario creado en 1868. Entrada en una etapa de
organización, nuestra Alta Casa de Estudios, se irá perfilando como la
escuela del liberalismo a la vez que satisface el interés especial que
había por la enseñanza de las ciencias. El Club se organiza como una
especie de universidad paralela, con el apoyo de catedráticos como Tristán
Narvaja. Por esto, la siguiente nota que forma parte de la colección de
documentos de que disponemos para reconstruir no solo la historia de la
institución y de las inquietudes intelectuales de la sociedad
montevideana, resulta particularmente significativa:
" En el siglo que vivimos y en la sociedad donde se producen
nuestras revoluciones, el "Club Universitario" tiene un
significación tan elevada como noble, porque además de constituir un
rango honorable en el seno de nuestro país, aproxima los hombres unos a
otros, uniéndolos por lazos indestructibles, personificando en ellos la
gloria del espíritu y propagando por el ejemplo de sus trabajos, como por
la ambición de su celebridad las más generosas emulaciones de la
inteligencia (...) Uno de los roles más notables que le está reservado a
esta Asociación fundado en el brillo de la fortuna o título de familia a
que hoy se inclina con generalidad la sociedad oriental, para sustituirla
por la aristocracia del espíritu, la única que puede ser posible y
aceptada, inevitable, porque está en la naturaleza, irresistible, por su
alma es la inteligencia siempre dueña de la última victoria, benéfica,
porque sin embargo de sus caprichos pasajeros el fondo eterno de sus
aspiraciones es constatemente lo verdadero, lo bello y lo bueno"
(Memoria de 1868).
Bibliografía: Ateneo de Montevideo. Conmemoración
del 70° Aniversario del "Club Universitario" Montevideo.
Tipográfica Atlántida. 1938. / Fernández Saldaña, José. Fichas
para un diccionario uruguayo de biografías. Montevideo. Talleres Gráficos
"33". 1945. T. 1. / Fernández Saldaña, José. Fichas para
un diccionario uruguayo de biografías. Montevideo. Talleres Gráficos
"33". 1945. T. 1. / Patiño, Héctor. Ateneo de Montevideo.
Una historia que comienza el 5 de setiembre de 1868. Montevideo.
Folleto explicativo. 1997. |
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